Don Quinn (Dennis Quaid) es un quisquilloso policía que reúne sagradamente a toda su familia en vísperas de Navidad. Viudo hace algunos años, esa tradición nunca se ha interrumpido, ni siquiera por la ausencia de su fallecida esposa, por lo que la llegada de un intruso tampoco será la excepción. Ese es el punto de partida de Feliz lo que quieras (Merry Happy Whatever), la nueva sitcom de Netflix.

La historia comienza cuando Emmy (Bridgit Mendler) visita la casa de su padre para cumplir con este encuentro anual. En este viaje a Filadelfia será acompañada por su nuevo novio, Matt (Brent Morin), quien no será de total agrado de su suegro por ser un emergente músico.

Con la seria intención de pedir la mano de Emmy, Matt tendrá que ceder mucho si quiere tener la bendición de este sobre protector padre. Y más que al patriarca, tendrá que conquistar a todos los Quinn, quienes son como una manada inseparable.

Si bien pareciera que se va a meter en un ambiente hostil, el club de los yernos lo acepta, así que tendrá todos los tips necesarios para sobrevivir en la familia. Aunque no debe ser iluso, pues nunca nadie es lo suficiente perfecto para un Quinn pura sangre, según el progenitor de esta particular estirpe.

Los hermanos

Una de estos es Patsy (Siobhan Murphy), una devota ama de casa quien junto a su esposo Todd (Adam Rose) buscan ser padres. Pero por más que lo intenten, hasta el momento no han tenido éxito en sumar un nuevo integrante al clan. ¿Será que habrá un milagro esta Navidad?

Quien también atraviesa por un momento difícil es el único hermano de los Quinn, Sean (Hayes MacArthur) pues tiene un mala noticia por contar. El ambiente navideño no lo ayuda en nada, pero la situación empeora por el temor que tiene de su padre, quien cree que sus hijos son todos perfectos.

Su esposa, Joy (Elizabeth Ho) medianamente aceptada por Don Quinn, alentará a Sean (Hayes MacArthur) a superar ese miedo pues ya no es un niño.

Y por último nos queda Kayla (Ashley Tisdale), la menor de los Quinn, quien tampoco lo está pasando muy bien en estas vísperas. Su esposo le pidió el divorcio frente a toda su familia, por lo que su actitud durante estas fiestas será algo errática.

Si bien las separaciones son dolorosas, este personaje es hilarante y como buena “Quinn” seguirá la tradición navideña contra viento y marea.

Simpática sitcom

Elementos como la risa envasada y el constante uso de planos generales, sin duda que recuerdan a las series de los años 80 y 90, por lo que puede ser un acierto para los eternos nostálgicos.

Pero lo que nunca pasará de moda son los clichés que siguen vigentes en una serie del 2019. El conflicto entre el suegro y el futuro yerno ya es una temática bastante explotada en el catálogo de series y películas de Netflix, pero Feliz lo que quieras tiene algo especial y emotivo, por lo que vale la pena verla..

En una fecha donde el reencuentro y la posibilidad de compartir con tus seres queridos se ve más cerca, esta serie podría ser un buen ejercicio previo a la noche buena.

La posibilidad de ver situaciones que te puedan recordar a tu propia familia, reflexionar sobre las pequeñas peleas, pero por sobretodo las cualidades de esas personas, son un verdadero cariño para el alma y un recordatorio de que la familia es el mejor regalo para esta fecha.

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