No hay duda alguna que Las Chicas del Cable es una de las mejores producciones españolas disponibles en Netflix. Por eso, que esta sea la última temporada, tiene a muchos fanáticos alrededor del mundo desconsolados por decirle adiós a estas queridas ex telefonistas.

Aunque para algunos es una buena noticia que este fin sea alargado en dos partes, pues les da más tiempo para despedirse de sus personajes favoritos. Para otros, es sólo alargar la agonía de saber que esta electrizante historia terminará.

Más allá de lo anterior, lo importante es que la primera parte de este camino ya está disponible en la plataforma de streaming.

Antes que te contemos que es lo que se viene en esta nueva entrega, haremos un recordatorio de memoria sobre qué pasó en el último capítulo de la cuarta temporada.

En ese final vimos el monumental escape de Sara, ahora Oscar (Ana Polvorosa), de la cárcel y de una sentencia a muerte por un asesinato que nunca cometió. Sus fieles amigas no lo abandonarían jamás frente a tamaña injusticia.

Lidia (Blanca Suárez), Carlota (Ana Fernández), Marga (Nadia de Santiago) y Ángeles (Maggie Civantos) lograron infiltrarse en el recinto penitenciario camufladas entre una compañía de teatro y tras desencadenar un motín, este grupo logra escaparse por una secreta salida que duramente cavaron.

El plan se había ejecutado a la perfección hasta que unos guardias se percataron de la situación, y les dispararon a las muchachas en su fuga. Ángeles fue mortalmente alcanzada por una de esas balas.

Malherida se despide de sus fieles compañeras y les encarga a su pequeña hija. Como una heroína despedimos a uno de los personajes más queridos de este quinteto de ex telefonistas.

¿Qué pasó después de la muerte de Ángeles?

La dolorosa pérdida no fue fácil para este grupo. Cada una tomó su rumbo y tras sietes años, ellas se reunirán en la última batalla que deberán dar para garantizar sus derechos. Ad portas de la Guerra Civil española, la acción tomará el protagonismo en esta quinta entrega.

Lidia se escapó a América con la hija de su amiga fallecida y su gran amor Francisco (Yon González). Si bien tuvieron mucha suerte allí, la ya adolescente Sofía (Denise Peña), quiere volver a sus raíces, por lo que se unirá al frente republicano en contra del fascismo.

Pese a la desaprobación de sus padres adoptivos, la joven escapará a la convulsionada Madrid para lograr su objetivo. Lidia se desesperará al pensar que no cumplirá con la promesa que le hizo a Ángeles y tendrá que volver al país que le trae malos recuerdos.

Pese que Lidia no lo pasará tan bien, la llegada de Sofía a Madrid será la excusa perfecta para que el separado grupo se reúna en la ciudad que se cae a pedazos a causa de la crisis social que atraviesa

Tras su fallido intento por la alcaldía y la monumental escapada de la cárcel, Carlota y Óscar se exiliaron en París. Hoy con una relación más consolidada, volverán con más energía y valor para luchar por sus derechos en su tierra natal. El retroceso y la pérdida de dignidad de las mujeres españolas les vuelve a encender esa chispa reaccionaria.

Para Las Chicas del cable ya basta el maltrato y el machismo. Encarnando y convergiendo todos esos deseos de cambios, Sofía será la motivación de esta lucha mayor que enfrentarán estas telefonistas. La ingenuidad y el anhelo de un nuevo futuro, recuerdan al quinteto en su primera temporada.

Del look and feel de esta serie nunca hay nada que criticar. La ambientación y personificación son de altísima factura.

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