8 fuentes de soda en Santiago a las que siempre dan ganas de volver
Todavía siguen ahí, con sus barras largas, los cucuruchos de servilletas, sus platos caseros y el infaltable schop frío. Aquí, ocho de nuestras fuentes de soda favoritas.
Todavía siguen ahí, con sus barras largas, los cucuruchos de servilletas, sus platos caseros y el infaltable schop frío. Aquí, ocho de nuestras fuentes de soda favoritas.
Uno de los bares históricos de calle Lastarria es el Torremolinos, que hasta el día de hoy resiste estoico, sin caer en las modas del barrio.
Sobrevivientes de las funciones rotativas del centro y de la calle Bandera llena de micros; esta fuente de soda especializada en veloces empanadas sigue resistiendo. ¿Por cuánto tiempo? Nadie lo tiene muy claro.
De día, y sobre todo de noche, este sitio bulle con gente que come y bebe. No es el más lindo ni el más barato de la ciudad, pero algo tiene… y que gusta a muchos.
A muy pocos pasos de Av. Irarrázaval y en plena Plaza Ñuñoa está el legendario bar y fuente de sodas Las Lanzas. Aquí un poco de su historia.
No sospechó este bar que en algún momento sería parte de un barrio de moda, el Barrio Italia, reconocido hoy por sus galerías con cuidados cafés y restaurantes en manos de reconocidos chefs. Y no soñó que compartiría vereda con una fábrica de pasta y helados italianos a los que los críticos gastronómicos les reparten […]
Tercera generación de carnicero, hoy se dedica mayormente al abastecimiento de carnes para hoteles y restaurantes. Sin embargo, aún conserva una carnicería en el mismo lugar donde partió su padre a comienzos del siglo pasado, la que por estos días se llena de ávidos clientes en busca del mejor corte parrillero.
Lejos de cualquier moda en comidas y bebidas, este local de 1940 mantiene una actividad admirable. Con clientes que hacen honor a su estética y mística, vale la pena ir a verlo.