Por Mariana Martínez.
El mundo cervecero en Buenos Aires está en plena revolución. Tal como ocurre hoy en Chile, son los pequeños productores quienes están intentando tomarse las calles. La diferencia entre aquí y allá es que los bares conocidos como brew pubs se han enfocado en producir y vender sólo sus propias marcas, por lo que para probar diferentes manos la única solución es, literalmente, irse de bares. Un consejo: no busque la botella ni el schop; en el puerto transandino se pide la pinta, un copón de medio litro.
Antares de San Telmo: Se producen en Mar del Plata desde 1998 y aunque exportan a varios países, gran parte de sus más de 250 mil litros de cervezas mensuales se venden en sus propios bares. Yo visité el de San Telmo, un viernes cerca de las 8 PM, y ya estaba hasta el tope, con fila para entrar afuera y mucha onda adentro.
Para familiarizarse con sus más de ocho estilos (entre ellas la Kölsch, Ipa y Porter) parta con una degustación por $ 68, de cuatro vasos a elección de 175 cc c/u; no deje fuera ni la aromática y amarga Ipa ni la Imperial Stout, con notas de café y chocolate. Su acotada carta incluye propuestas de maridaje para cada estilo. Experimente con una tabla de cuatro picoteos diferentes (por $ 160) a elección; muy buenos están el pollo al escabeche, la tortilla de papas y las empanadas de cordero. El happy hour de 2×1 en cervezas es de 6 a 7 PM.
DONDE: Bolívar 491, San Telmo TEL.: 11.43423836 HORARIO: Lu. a do., 6 PM a 3 AM SITIO: www.cervezaantares.com.ar.
La cervecería de barrio: A unos pasos de Antares está Breoghan: un bar más piola, al estilo de la serie Friend’s, con sofás para conversar a volumen más bajo y con menos luz. Su lema dice: “Apoya la revolución cervecera, apoya tu cervecería local”. Su producción se hace en la misma casa y se venden en sifón con nombres como Fire Ipa o Flequillo Brown Ale (vale $ 50 la pinta y $ 32 la media).
Aquí tienen, además, una buena, aunque limitada, selección de cervezas nacionales y extranjeras, como la argentina Jarva Johnnies Ipa, una rubia con mucho carácter. Para acompañar la fuerza de su Fire Ipa, pida de su carta irlandesa un cerdito agridulce ($ 90) y para la muy apreciada Stout (de burbuja microscópica y compacta) el lomo, cocinado con la misma cerveza ($ 95).
DONDE: Bolívar 862, San Telmo TEL.: 11.43009439 HORARIO: Lu. a do., 6 PM a 3 AM.
El cosmopolita: Si busca el mejor pollo frito de la ciudad, en compañía de muy buenas cervezas locales, Nola es el bar. Uno cosmopolita cuya especialidad es la cocina cajún, propia de Nueva Orleans. La carta de comida y cervezas está escrita en los pizarrones colgados de las paredes; usted elige, pide y paga en la caja. Al lado, en la misma barra, le sirven directo de la canilla cualquiera de las cuatro cervezas Broëders, hechas por Francisco Terren (el otro socio de Nola) y su hermano.
Cuando su plato esté listo, gritarán su nombre desde la cocina a la vista. No se pierda el insuperable pollo frito, crocante y suavemente especiado. Las dos piezas más una pinta valen sólo $ 115. ¿Otro imperdible? El Gombo, un estofado picante muy sabroso de chorizo, pollo y arroz ($ 90). De 5 PM a 8 PM es el happy hour, entonces la pinta vale $ 35. Ojo, la cocina cierra a las 11.30 PM y aceptan sólo efectivo.
DONDE: Gorriti 4389, Palermo TEL.: 11.63501704 HORARIO: Mi. a lu., 5 PM a 2 AM MAIL: info@nolabuenosaires.com.