Por Lya Rosén D.

En mayo de 2014, la comedia Buenos vecinos se tomó la taquilla de Norteamérica por asalto, recaudando sólo en su primer fin de semana más de US$ 48 millones. Y todo gracias a un guión simple, pero efectivo: el joven matrimonio Radner (Seth Rogen y Rose Byrne) ve con horror cómo a la casa vecina de su tranquilo barrio se mudaba la fraternidad de universitarios encabezada por Teddy Sanders (Zac Efron).

Dos años más tarde nos reencontramos con Mac y Kelly Radner algún tiempo después, cuando están a punto de mudarse a una vivienda que se adapte mejor a dos hijas, vendiendo su actual casa. Pero la pareja interesada decide esperar 30 días para concretar la compra, dejando a los Radner en una compleja espera, que se vuelve aún más compleja con la llegada de nuevos vecinos.

Ahora ya no deberán compartir barrio con una fraternidad masculina, sino que con el grupo de chicas liderado por Shelby (Chloë Grace Moretz), las Kappa Nu, que busca divertirse a gusto, lejos de las reglas de su universidad. Un objetivo para el que cuentan con la ayuda de Teddy, quien ante el próximo matrimonio de su mejor amigo, Pete (Dave Franco), se ve en la necesidad de buscar un lugar donde dormir.

Pero pronto Teddy se une a la cruzada de los Radner y elaboran una serie de alocados planes para echar a las muchachas del hogar vecino, dando vida a una trama que no tiene originalidad, pero sí bastante humor para adultos, básico y efectivo.

Título Original: Neighbors 2: Sorority Rising
Género: Comedia
País: Estados Unidos
Año: 2015
Director: Nicholas Stoller
Guión: Andrew Jay Cohen, Brendan O’Brien
Reparto: Seth Rogen, Rose Byrne, Zac Efron.
MAYORES DE 14 AÑOS