Por Marcelo Morales C.
El 2012 se anunció este proyecto, que llevaría al formato digital las aventuras de Snoopy y Charlie Brown, los entrañables personajes creados por Charles M. Schulz en 1950 y sobre los cuales trabajó hasta su muerte, en el 2000. Así, sin el “padre” presente, esta película levantó muchas sospechas respecto de si respetaría el espíritu original de la serie.
Bajo el sello de los estudios Blue Sky (los mismos de la saga La era de hielo) y con un guión a cargo de Craig y Bryan Schulz (hijo y nieto del creador, respectivamente), se puede decir que el riesgo valió la pena.
Tal como en la recordada serie televisiva surgida en los años 60, la historia se divide entre las aventuras del apesadumbrado Charlie Brown y el de su particular y alocado perro Snoopy.
Llega el nevado invierno y a Charlie Brown le sigue saliendo todo mal, como encumbrar esa cometa que siempre termina siendo devorada por un árbol, lo que provoca las burlas y desconfianzas de sus amigos.
Pero a su lado siempre está Snoopy, que vive sus propias e imaginativas aventuras a bordo de su casa: en su imaginación ésta se convierte en avión con el que combate al malvado Barón Rojo.
La historia da un giro inesperado, sobre todo para Charlie, cuando al colegio llega una nueva integrante, la chica Pelirroja, de la que se enamora súbitamente. Cómo enfrentarse a ella dignamente será su gran desafío.
La película se dirige a un público adulto a través de este personaje, apelando a la nostalgia de quienes crecieron con la serie, y con una delicada historia sobre ese gran primer amor. Pero no se olvida del público infantil, con las alocadas historias imaginadas por Snoopy. Ambas líneas son logradas con eficacia y, sobre todo, con mucho cariño.
Título Original: The Peanuts Movie
Dirección: Steve Martino
Actores: Lindsay Duncan, Jim Broadbent, Jeff Goldblum, Olly Alexander
Calificación: Para todo espectador.