Gracias a un sitio de citas en línea, el octogenario viudo Roy Courtnay (McKellen) conoce a Betty McLeish (Mirren), una viuda que a sus setenta y tantos años que disfruta de una buena vida. Su primer encuentro es en una cena, donde revelan que el primer nombre que se dieron era falso y que él tiene un hijo en Australia, mientras ella solo tiene un nieto.
Poco después, se le revelan al público las verdaderas intenciones de Courtnay, quien no está en busca de un romance, sino de apoderarse de la pequeña fortuna de la profesora jubilada. Plan criminal al que se suma un elaborado engaño que encabeza junto a su socio, Vincent (Jim Carter), para obtener el dinero de unos inversionistas.
Poco después de conocerse, tras fingir una molesta dolencia a una rodilla, Roy logra de que Betty lo invite a quedarse con ella, en la casa que posee en los suburbios de Londres, donde en ocasiones también se aloja su nieto: el desconfiado Steven (Russell Tovey).
No pasa mucho tiempo para que también aparezca en el lugar Vincent, haciéndose pasar por el consejero financiero de Courtnay. Aquí es cuando le sugiere casualmente a la madura pareja que combinen sus ahorros en una sola cuenta corriente, para así lograr un mayor interés.
Y aunque la relación nunca llega a lo físico, el maduro estafador va envolviendo a su víctima para lograr su objetivo, hasta que un viaje que hacen a Berlín comenzará a revelar poco a poco algunos sucesos del pasado que podrían cambiar su futuro.
Buenas actuaciones para una trama complicada
Luego de haber coincidido solo en una ocasión en el teatro, cuando en 2001 protagonizaron la versión para Broadway de La Danza del sueco August Strindberg, por primera vez los actores británicos Helen Mirren e Ian McKellen se unen para protagonizar una película.
En este caso, la versión para la pantalla grande de la novela de The Good Liar, de Nicholas Searle. Una ocasión que se presenta varios años más tarde de aquel montaje, cuando ellos ya forman parte de la tercera edad y son considerados estrellas de cine.
Aquí, bajo la dirección de Bill Condon (La Bella y la Bestia), el dúo despliega una vez más su reconocido talento, dando forma a una trama que da una nueva, aunque un poco forzada mirada al género del suspenso, al poseer personajes que pueden estar en la vejez, pero están muy lejos de reflejar decadencia.
DIRECCIÓN: Bill Condon
PROTAGONISTAS: Helen Mirren, Ian McKellen, Russell Tovey, Jim Carter, Mark Lewis Jones
GÉNERO: Drama/Suspenso
CALIFICACIÓN: Para mayores de 14 años