Por Lya Rosén D.

Ubicada en la delgada frontera entre el terror y el suspenso, esta realización, dirigida por el novato español Lluís Quílez, tiene como escenario Colombia, país al que se muda la pareja conformada por la inglesa Sarah (Julia Stiles) y su marido estadounidense Paul (Scott Speedman), además de su hija Hannah (Pixie Davies). En la localidad, llamada Santa Clara, los espera Jordan (Stephen Rea), padre de Sarah y además dueño de la gran fábrica de papel que se ubica en el lugar, y donde la chica se hará cargo del puesto de gerenta general, mientras su marido continúa su trabajo como ilustrador independiente.

Pero lo que suponen el inicio de una mejor vida, en una locación pintoresca -que precisamente por esos días conmemora el Día de los Niños Santos-, pronto, como es de esperar, se transforma en pesadilla. Todo por culpa de los secretos que oculta su nueva casa, que en algo se dan a conocer al espectador al inicio de la película.
Y como es ya una constante de muchas realizaciones de horror, los niños son la pieza clave.

Ellos son víctimas y victimarios, además de protagonistas de las escenas más “escalofriantes” del relato, como pequeños y vengativos fantasmas que hacen de Hannah el blanco de su acción. Un proceder que, como sabremos más tarde, tiene directa relación con los errores del pasado de uno de sus protagonistas.

Pero lo que parecía una muy buena idea para un thriller paranormal, finalmente quedó sólo como el bosquejo de lo que pudo haber sido. Esto, debido esencialmente a la debilidad de las actuaciones y la poca resolución de los momentos clave de suspenso, que contrastan totalmente con los paisajes tropicales que resaltan a lo largo de la hora y media de su lenta narración.

Titulo original: Out of the Dark
Dirección: Lluís Quílez
Actores: Julia Stiles, Scott Speedman, Stephen Rea, Alejandro Furth
Calificacion: Para mayores de 14 años