Corre 1951 y entre los jóvenes de Belleville, New Jersey, se cuenta una gran cantidad de descendientes de italianos que llegaron a principios del siglo XX a Estados Unidos, en busca del sueño americano. Entre estos “italoamericanos” está Tommy DeVito, un muchacho que en la primera escena de la cinta devela la verdadera historia -con sus luces y sombras- de The Four Seasons, uno de los grupos musicales más importantes de la historia musical norteamericana. La leyenda fue primero llevada a los escenarios de Broadway en 2005 y como musical tuvo éxito. Ahora llega a los cines de la mano de Clint Eastwood.
Acá recibió el nombre de Jersey boys: persiguiendo la música y en ella, el actor y director responsable de cintas como Los imperdonables (1992) y Million dollar baby (2004) se atreve a incursionar en el musical al mostrar el ascenso a la fama del grupo encabezado por Frankie Valli y su característico falsete y cuyas canciones más conocidas de los años 50 y 60 son Big girls dont cry, Walk like a man y Can’t take my eyes off you. El género no le es tan lejano a Eastwood, si se piensa en películas como Honkytonk man (1982), en la que interpretó a un cantante alcohólico, o Bird (1988), en que revivió la figura del jazzista Charlie Parker.
En la narración biográfica de Jersey boys… van desfilando las canciones y los relatos en primera persona de cuatro de sus protagonistas: en los primeros minutos, por medio de la descripción de DeVito (Vincent Piazza), el público se encuentra con Frankie Castelluccio (John Lloyd Young) en la peluquería de barrio, donde da sus primeros pasos en el mundo de las afeitadas, ni más ni menos que en la cara del mafioso Gyp de Carlo (Christopher Walken). Este es uno de los múltiples lazos que ligan a estos jóvenes con el crimen organizado y a veces también improvisado, como en la escena en la que Frankie, Tommy y el hermano de este último, Nick (Johnny Cannizzaro), intentan robar una caja fuerte con no muy buenos resultados.
Pero lo esencial en Jersey boys… es apreciar cómo Eastwood retrata la lucha de sus protagonistas por dejar atrás el anonimato, teniendo su punto de inflexión la noche en que Tommy y Frankie -que ya no es Castelluccio, sino de apellido Valli- deciden bautizar a su grupo como The Four Season junto a los otros dos integrantes, Nick Massi (Michael Lomenda) y Bob Gaudio (Erich Bergen). Lo hacen inspirados por el letrero luminoso de un bowling de la ciudad.
Gracias a su perseverancia, los cuatro de New Jersey logran después su primer éxito radial con Sherry, canción que los lleva al número uno de popularidad y, más tarde, a disfrutar de la fama y el dinero. Sin embargo, esto le trae problemas personales a algunos integrantes, como a Frankie Valli, quien sufre el término de su matrimonio y el posterior alejamiento de sus hijas.
En suma, es un cuento anclado en la vida real, donde cuatro talentosos jóvenes concretan el ansiado sueño americano al ritmo de composiciones musicales que fueron parte de las vidas de los adultos, tanto estadounidenses como chilenos y que hace un tiempo superaron la barrera de los 60 años.
Por lo mismo, puede ser un tanto aburrido para un público más joven que no sea amante de los musicales o de las cintas sobre italoamericanos al estilo de la película Buenos muchachos (1990), de Martin Scorsese.
Titulo original: Jersey Boys Direccion: Clint Eastwood
Elenco: Vincent Piazza, John Lloyd Young, Erich Bergen, Michael Lomenda
Calificación: Para todo espectador.
**Eastwood y la música**
Clint Eastwood es un amante de la música y el jazz es su género favorito. Ha compuesto las bandas sonoras de varias de sus películas, como Río místico (2003).