Aunque ya llevaba algunos años como actor en películas y series de TV, Chadwick Boseman pasó a ser una figura reconocible de la actuación desde que se sumó al Universo Cinematográfico de Marvel, encarnando a Pantera Negra en hasta el momento cuatro películas, incluída la cinta homónima de 2018.
Ahora el actor deja atrás la fantasía y aventura del mundo de los superhéroes para convertirse en el protagonista de Nueva York Sin Salida, una cinta que mezcla acción y suspenso en las calles de la Gran Manzana.
Pero con ella Boseman no se aleja del todo de los filmes con el sello Marvel, ya que dos de los productores de su nueva apuesta son Anthony y Joe Russo, los realizadores de Avengers: Infinity War (2018) y Avengers: Endgame (2019), y quienes pensaron inmediatamente en él cuando llegó a sus manos el guión de Nueva York Sin Salida.
El inicio del relato de esta película lleva 13 años atrás, cuando en una iglesia de Nueva York el pequeño Andre Davis (Christian Isaiah) despide antes de tiempo a su padre, un oficial de la policía que murió a manos de criminales.
Casi una década más tarde, un maduro Andre (Boseman) también es parte de la policía de Nueva York y enfrenta un difícil momento de su carrera, ya que ante el Departamento de Asuntos Internos debe atestiguar que las veces que ha hecho uso de su arma han sido solo en defensa propia.
Pero las cosas se complican aún más cuando debe ir tras los pasos de dos criminales que mataron a más de media decena de policías, luego de que fueran descubiertos apoderándose de parte de un cargamento de cocaína que escondido en un restaurante de Manhattan.
Bajo la supervisión del Capitán Matt McKenna (J.K. Simmons) y en compañía de la oficial de narcóticos Frankie Burns (Sienna Miller), Davis comienza la búsqueda de las asesinos. Con la certeza de que no han abandonado todavía Manhattan, el oficial ordena el cierre de todos los puentes que conectan la isla con el resto de NY.
A las pocas horas de la persecución se conocen las identidades de los criminales: el veterano Ray Jackson (Taylor Kitsch) y Michael Trujillo (Stephan James), el hermano menor del mejor amigo de Jackson en el ejército.
Suspenso, acción y buenas actuaciones
Con Davis y Burns pisándole los talones a Jackson y Trujillo, el realizador irlandés Brian Kirk -quien hasta el momento ha desarrollado la mayor parte de su carrera en TV- despliega la que, hasta ese momento, parece otra persecución entre policías y ladrones en pantalla grande.
Sin embargo, las cosas no son como parecen. No solo el dúo criminal sospecha del “trabajo” que les encomendaron, donde 30 kilos de cocaína eran realmente más de 300. También la duda se apodera de Andre, cuyo instinto profesional le dice que el caso es más complicado que lo que aparenta.
Así se desarrolla un relato de una hora y media de duración, donde logradas escenas de acción se van combinando con pasajes de un correcto nivel de suspenso. Y es en medio de las dudas y balaceras, y en compañía de un buen elenco, que Boseman deja en claro que su registro va más allá de Marvel y su heroico rey de Wakanda.
DIRECCIÓN: Brian Kirk
PROTAGONISTAS: Chadwick Boseman, Sienna Miller, Stephan James, Taylor Kitsch, J.K. Simmons
GÉNERO: Acción/Suspenso
CALIFICACIÓN: Para todo espectador mayor de 7 años