Mucho se esperaba de esta película centrada en uno de los más conocidos antihéroes de Marvel.
No solo representaba el paso inicial del universo cinematográfico que Sony Pictures quiere explotar en compañía de la casa de historietas y algunos de los personajes sobre los cuales el estudio todavía posee los derechos. También era la oportunidad de ver cómo Tom Hardy, quien siempre ha demostrado gran solidez en pantalla, se consolidaba con un rol protagónico en el mundo de héroes y villanos que sigue en expansión bajo la tutela de Disney y Warner, luego de haber encarnado al malvado Bane en Batman: El Caballero de la Noche Asciende (2012).
Ahora Hardy es Eddie Brock, un rudo y cabezadura periodista que se ha hecho de un nombre con sus investigaciones periodísticas para la TV, que está a punto de casarse con la abogada Anne Weying (Michelle Williams).
Todo comienza a tomar otro cariz cuando el jefe de Brock le encomienda entrevistar a Carlton Drake (Riz Ahmed), el millonario líder de Fundación Vida que estaría detrás de sospechosas investigaciones científicas y que, como el público conoció al inicio de la película, también está relacionado con las muestras de vida extraterrestre que fueron transportadas a nuestro planeta por una siniestrada nave espacial.
Luego de la fallida entrevista, Brock no solo pierde su trabajo sino que también es abandonado por su novia. Pero las cosas se pondrán todavía peor, luego de que el cesante reportero acepte investigar a Drake y sus investigaciones en las mismas instalaciones de Fundación Vida.
Aquí, guiado por una doctora con algo de conciencia, Eddie es testigo de las atrocidades que se están realizando en nombre de la ciencia y se convierte en el huésped perfecto para una de los parásitos alienígenas o simbiontes que Drake pretende fusionar con los humanos.
Sin embargo, Hardy desperdicia la oportunidad de darle cuerpo y voz a uno de los villanos más conocidos del mundo de Spider-Man, con una sobreactuada participación como Brock, y la casa productora no logra dar con el tono ni el ritmo adecuado para este tipo de cintas; un hecho no menor ante los planes de nuevas películas en torno a Marvel y villanos como el vampiro Morbius. A esto se suma el poco interés en desarrollar más a los secundarios del relato, en especial a Williams en el papel de la abogada Anne.
DIRECCIÓN: Ruben Fleischer
PROTAGONISTAS: Tom Hardy, Michelle Williams, Riz Ahmed, Jenny Slate, Reid Scott
GÉNERO: Acción/Terror
EDAD: Para todo espectador mayor de 7 años