Aunque ha pasado más de un siglo desde la publicación de Drácula, el clásico escrito por el irlandés Bram Stocker sigue siendo la inspiración de títulos como Renfield: asistente de vampiro.

La película de Chris McKay que le da una relectura a la novela gótica, centrando su historia en el personaje que en las páginas del libro era un paciente del hospital psiquiátrico del Dr. Seward.

El que, mientras se alimentaba de insectos, rendía pleitesía al monstruoso noble transilvano, en una relación de completa dependencia que ahora explora la cinta que llega a salas locales.

Donde a través de la comedia y el terror, con mucho gore, se revive a Renfield con las características adicionales que le dieron largometrajes clásicos, como Drácula (1931) de Tod Browning.

Así, y parodiando precisamente a esta última cinta -en uno de sus mejores momentos-, el relato comienza mostrando cómo el joven abogado conoce al conde rumano a inicios del siglo XX.

Renfield trata de alejarse de Drácula

Para luego dejar atrás el blanco y negro de la imagen y ambientarse en un más colorido presente, donde Robert Montague Renfield (Nicholas Hoult) participa de una reunión en Nueva Orleans.

La que es una de las citas del grupo de ayuda para quienes están en una relación tóxica, a la que él asiste para poder sobrellevar el opresivo vínculo laboral que soporta desde hace décadas.

Labor en la que debe surtir a su amo, el Conde Drácula (Nicolas Cage), de víctimas, mejor si son inocentes, que le proporcionen la sangre para recuperarse tras un accidente con los rayos del sol.

Pero pronto se suma a esta interesante interpretación sobre la relación entre el servil Renfield y el narcisista vampiro, un giro de la trama que involucra a Rebecca Quincy (Awkwafina).

Una agresiva policía de tránsito que solo quiere atrapar a la peligrosa banda de Los Lobos, para vengar a su padre, aunque esto sea casi imposible ya que casi todos sus colegas son corruptos.

Comedia y terror se mezclan con acción

La misma agente que se cruza en el camino de Renfield y lo inspira a tener una vida mejor, que implica esencialmente alejarse de Drácula. Sin embargo, su plan de cambio no le dura mucho.

Ya que no solo debe enfrentar a su enojado jefe, sino que también al mafioso Teddy Lobo y su poderosa madre, mientras la trama pasa de la comedia a escenas de acción marcadas por la violencia.

Las que incluyen desmembramientos, explosiones corporales y mucha sangre, al mismo tiempo que, gracias a los insectos que consume, Renfield adquiere fuerza y velocidad sobrehumanas.

En la particular y arriesgada apuesta de la película por ir más allá que la comedia mezclada con el horror más clásico, haciendo de la acción un ingrediente adicional que no siempre funciona.

Lo que no logra restar a esta mirada al famoso conde vampiro y su asistente la capacidad de entretener, en especial gracias al trabajo de Cage como el conde y las divertidas alusiones a su mito.

FICHA TÉCNICA

DIRECCIÓN: Chris McKay

PROTAGONISTAS: Nicholas Hoult, Nicolas Cage, Awkwafina, Ben Schwartz, Adrian Martinez, Shohreh Aghdashloo, Brandon Scott Jones

GÉNERO: Comedia, Terror, Acción

CALIFICACIÓN: Para mayores de 14 años