Por Evelyn Briceño

Con un papá endocrinólogo y un tío agrónomo, Carolina Contreras (38) siempre sintió curiosidad por la biología. Después de titularse de Arquitectura en la UC, su interés por las ciencias naturales no paró. Así, después de siete años ejerciendo su profesión y luego de leer The art of fermentation -un libro que revisa la historia de la fermentación, y que enseña a fabricar quesos y otros alimentos- se lanzó a experimentar en su casa. Con leche y cuajo en mano, y dominando la técnica de la coagulación y fermentación, Carolina dio con sabrosos quesos. Hoy enseña a elaborarlos en la Casa de Oficios, en calle Infante, durante todo el año.

—¿Ha mejorado la cultura del queso acá?
—Algo, pero tiene que seguir creciendo por el alto valor nutricional del queso y por el gran despliegue de sabores y texturas que le da a la gastronomía.

—¿Qué variedades enseñas a preparar?
—Desde queso fresco y mozzarella, más livianos y menos grasos, a otros que casi no se venden en Chile, como el Valençai, de origen francés.

—¿Quiénes llegan a tus cursos?
—Como casi todos son vespertinos, la mayoría son profesionales de entre 30 y 50 años, todos muy curiosos. Mitad y mitad entre hombres y mujeres, y varios matrimonios y parejas de pololos.

—¿Cuánto dura un taller de quesos?
—El intensivo, medio día. El avanzado, en cambio, dura tres semanas para poder hacer quesos más complejos.

Casa de Oficios
DONDE: Infante 305
MAIL: inscripciones@casadeoficios.cl
HORARIO: En www.casadeoficios.cl
PRECIO: Desde $ 40.000 EDAD: Mayores de 18
EST.: En calles aledañas, gratis.