Ir a La Vinoteca de Manuel Montt es una experiencia completa. A su inmensa oferta de vinos, a buenos precios y siempre con ofertas, está sumando otras cosas.
El año pasado estrenó una zona para comprar quesos y embutidos finos, de origen, más una panadería con baguettes y otros panes hechos con masa madre. Eso, aparte de una cafetería al paso para tomar buen café y degustar un pastel o un sandwich preparado con esos mismos productos a la venta, todo hecho ahí mismo.
La gracia es que ahora hay media docena de cómodas mesas y sillas de madera y mimbre para sentarse a placer, tomar un rico desayuno, un café de media mañana e, incluso, un almuerzo, con ensaladas y sopas que estarán disponibles a fin de mes.
El café que sirven ahí es italiano, bien equilibrado, y se prepara en todas sus versiones, desde cortado a macchiato.
Un ristretto siempre es una buena opción para recargar energías ($ 1.900). Y ojo, que para estos días de invierno también hay chocolate caliente, hecho con pastillas de cacao de origen belga que se disuelven lentamente en la leche, que también puede ser descremada ($ 2.800).
Si no quieres café ni chocolate, pide el jugo de naranjas recién exprimidas ($ 1.800), fresco y sano.
Dulces y salados
(Fotos: Valentina Miranda Vega)
Si eres dulcero, para acompañar elige un esponjoso brownie con nueces ($ 2.000) o un crujiente pan de chocolate ($ 990). También pueden ser unos tentadores cañoncitos rellenos con dulce de leche ($ 1.400).
¿Una opción más fresca? La tartaleta de pera, con el dulzor justo y grande, que alcanza para dos ($ 2.900).
Para los de gustos salados, los sandwiches en un crujiente pan de baguette resultan irresistibles. Hay uno delicioso con jamón de campo y queso brie ($ 3.900) y otro de arrollado huaso y palta ($ 3.800).
HORARIO: Lunes a sábado, 8.30 AM a 9 PM.
ESTACIONAMIENTO: Frente al local, pocos, gratis.