En Viña hay muchos restoranes pero pocos con una propuesta distintiva. La mayoría apuesta por parecerse a alguien más, con el foco más puesto en atraer a clientes con los happy hours que con una identidad propia. Eso produce una homogeneidad en la oferta, donde influye más el producto de moda —ya sea el gin, la pizza napolitana o las smash burgers— que un servicio distintivo.
Una excepción es La Vinoteca, tienda que hace dos años y medio tiene su propio restorán —al igual que el resto de las sucursales en Santiago y Puerto Varas—, quizá el único de Viña del Mar con este nivel de coherencia entre atención, ambiente y calidad de sus platos.
Su carta, como es lógico, gira alrededor del vino, y cada plato, desde la entrada hasta el postre, puede maridarse con alguna de las cientos de variedades que ofrecen en su catálogo. La gracia es que cualquiera de sus botellas puede descorcharse al mismo precio de la tienda.
Un refugio en el centro de Viña
Es una virtud que La Vinoteca permanezca en una zona central de la ciudad —8 Norte 664, a una cuadra de Av. Libertad—, y no se haya tentado con escapar hacia Reñaca o Concón. Como el protagonista es el vino, aquí se hace fácil llegar a pie o transporte público desde distintos puntos de Viña.
Su gran terraza con techo bioclimático, bañada casi todo el día por la luz natural, permite aislarse del clima exterior pero no del movimiento de la ciudad. Eso le da al local un ambiente relajado —admiten mascotas—, igual que la atención del personal, cercana, amistosa y muy bien informada.
Apenas uno se sienta llega una contundente hogaza de pan de masa madre, de fabricación propia y recién horneado. Su corteza crocante y masa esponjosa, con una acidez justa, lo hacen adictivo, con mantequilla, aceite de oliva o incluso solo.
Aquí conviene, si uno busca dejarse sorprender, seguir las recomendaciones de sus meseros y meseras, todos muy capacitados a la hora de sugerir maridajes así como de explicar las virtudes y características de cada vino.
Maridajes impecables
Para partir hay muchas opciones, frías o calientes, entre tablas de quesos ($16.990 para dos personas), charcutería ($6.990 las dos unidades de jamón serrano sobre pan baguetón, por ejemplo), tiraditos ($21.990, con locos, langostinos y pescado) o tártaro de salmón ($14.990).
Si hay hambre y en la mesa más de dos personas, buena idea es la provoleta ($14.990), que llega en una sartén de hierro fundido y sobre una cama de cebolla morada caramelizada. En La Vinoteca sugirieron maridarla con la Gran Mezcla de la viña López Pangue (Valle de Casablanca), un delicado ensamblaje de syrah, malbec y petit syrah ($9.990).
Otras opciones interesantes son los ostiones a la parmesana ($22.990 las seis unidades), gratinados con puerros a la crema. O los chipirones ($12.990), al ajillo, con ají cacho de cabra. O, para los más parrilleros, las mollejas de vacuno ($16.990), bien crocantes con chimichurri. Cualquiera de ellos puede encontrar su maridaje entre los más de treinta vinos que el local tiene para servir en copa.
Entre los platos principales destaca la carne, aunque también hay varias alternativas vegetarianas. Como los sorrentinos de zapallo ($16.800), bañados en una salsa de queso azul y pistacho, o el risotto de setas ($18.800), hecho con hongos de la temporada.
El más pedido, eso sí, es la plateada braseada ($19.990), bien tierna y caramelizada, cocinada con tocino y champiñones, y acompañada de un cremoso puré de papas. Su maridaje ideal es una copa de carmenere Leal ($8.500), de Casas Patronales (Valle de Cauquenes).
Otro que sale mucho es la milanesa ($19.990), cubierta de mozarella fundida y un fino prosciutto. Llega con unas suaves papas fritas y un mix de hojas verdes. El vino sugerido es el blend Memorias ($8.990), de la Viña El Principal (Maipo), donde predomina el cabernet sauvignon.
Platos marinos y postres de Gustavo Sáez
Mucha de la gente que viene de paseo a Viña espera también servirse un plato más costero. ¿Para qué viajar a la playa a seguir comiendo vacuno o chancho? Para saciar esas expectativas está la merluza austral ($18.990), que se cocina a la plancha y se sirve con puré de arvejas y un salteado de habas, champiñones, tocino y apio.
O el tradicional salmón ($19.990), aquí acolchado sobre un arroz cremoso y atomatado con alcachofas y bolitas de mozzarella. O el intenso pulpo ($24.990), con papas a la crema y champiñones.
Todo llega rápido, con los platos siempre bien explicados y para qué decir el vino: cada persona de La Vinoteca sabe de lo que habla, cuál es la historia de cada botella y las razones de por qué la sugieren.
Eso también ocurre con los postres. La carta fue diseñada por el chef pastelero Gustavo Sáez, reconocido como el Mejor de Latinoamérica el 2016 y a cargo de los dulces en restoranes como Boragó y 99.
Cada uno de los cuatro postres (todos cuestan $8.990) es una concentración de sabor y textura, basadas en platos tradicionales pero con una original salida. Como el suspiro frambuesa, un copón que se inspira en el postre peruano pero con compota de fruta y crumble de almendras.
Algo parecido pasa con L’impostore, una versión del tiramisú pero con agarrapiñada de avellanas y una espuma de chocolate blanco. La gloria, eso sí, se puede encontrar en el chocolatoso, un vaso con bizcocho de chocolate, almíbar y crocante de cacao, con mousse y helado de chocolate. Si se junta con una copa de vino fortificado (tipo oporto) como el Fortmidable de Massoc Frères ($7.500), el resultado es celestial.
Si se va a la hora de almuerzo, y en día de semana, recomendamos pedir la tarde libre. Hacer durar una copa de vino en esa terraza mientras afuera la vida pasa apurada es un placer que no merece urgencias ni compromisos.
La Vinoteca Viña del Mar
Restaurante Pet Friendly
Dirección
8 Norte 664
Viña del Mar,
Chile
Teléfono
Horario
Lunes a sábado, de 1 PM a 12:30 AM.