Si te emocionaste con el triunfo de Croacia en el Mundial de Rusia. O al menos te dieron ganas de saber más de su cultura y sabores, entonces anda al Estadio Croata.
Ahí está Jadran, un restaurante abierto al público donde la carta es internacional, es decir, con harta pizza y sándwiches.
Pero además hay platos tradicionales de Croacia. Joyitas típicas de su cocina.
Un ejemplo es el “Čevapčiči” ($ 6.500), que son unos rollitos hechos de tres tipos de carne, cerdo, cordero, vacuno.
Rollitos que vienen aliñados con ajo, perejil y una salsa en base a pimentón, con un toque de cebolla cruda.
Otro plato que suele estar es el “bacalao batido” ($ 9.000), típico del tiempo de Pascua.
Se trata del bacalao seco y salado que luego se remoja, se le saca la sal y se pasa por un batido con papa, ajo y perejil.
Si tienes suerte puede encontrarte con el “Trípice” ($ 5.500), similares a los callitos españoles, con chorizo y un toque de salsa de tomates.
Y de postre pide la “torta de ciruela” ($2.500), una maravilla.
A pedido en el Estadio Croata
Otra posibilidad es que pidas con anticipación qué quieres comer. O sea, que hables con el chef, Danilo Radnic, cosa que puedas probar otras especialidades.
Como la “musaka” que es la tradicional lasaña de berenjenas. O el “peka de cerdo”, un chanchito que originalmente se hace en campana con las brasas encima, y aquí se cocina lentamente para lograr que quede tiernísimo.