Por Sofía Merino
El chef catalán que fue alumno de Ferrán Adriá, que es dueño de un par de restaurantes en Europa y que hace de jurado en MasterChef Chile, ya está en su tierra natal. Desde allá, comparte un par de datos.
—¿Dónde encontrar cocina española de calidad acá?
—Desde los primeros días de marzo, en El Barrio, de mi ‘hermano’ Christopher Carpentier (A. de Córdova 4263). Nuestra “penúltima” gamberrada fue la cocina española para divertir y agradar. Me gustan de ahí las patatas bravas, bien seleccionadas, bien pochadas, bien fritas, bien cortadas y bien servidas. Las hago con una receta en la que me inspiré hace 12 años y que he repetido en 22 restaurantes del mundo.
—Cuando estuviste en Chile, ¿dónde ibas a comprar tus ingredientes para cocinar lo español?
—Hace nueve años, cuando estuve acá, en el restaurante Arola del Ritz-Carlton, me recorrí todos los mercados. Del Mercado Central me impresionaron los erizos. Los de acá son más grandes que los de España, con un sabor a mar más acusado, sin el dulzor del erizo de allá.
—Un lugar de Santiago donde le pongan cariño al plato.
—En cualquier boliche de acá, el trato y el cariño que ponen los profesionales en la comida es encomiable. Me gusta tomarme una cerveza y una empanada a la entrada del Pueblito de Los Dominicos; también, ir a comer con amigos al Liguria de Manuel Montt.
—El hotel en el que más te ha gustado quedarte acá…
—El Hotel Cumbres de Vitacura es mi favorito (Av. Kennedy 4422). Tiene una decoración cómoda, elegante, sin pretensiones. Está todo pensado para que te sientas en casa. Y cuando estás viviendo cuatro meses en un hotel, eso se agradece. Eso y el trato humano.
—¿Qué estás leyendo?
—Dos cosas. Cocinando con las estaciones, el nuevo libro de cocina de Ennio Carota, y en plan más serio, La venganza de la geografía, de Robert D. Kaplan, de cómo la geografía ha sido un factor determinante en la forja de las distintas naciones, desde el Egipto faraónico hasta la Primavera Arabe.
—¿Con qué canción subes el volumen de la radio?
—Con Bohemian Like You, de The Dandy Warhols. La escribió Courtney Taylor-Taylor, que para mí es un auténtico personaje dentro de la escena underground americana. La escucho cuando quiero automotivarme.