Desde el 27 de julio y hasta el 14 de octubre estará en el Museo Nacional de Bellas Artes la retrospectiva de una de las fotógrafas chilenas más importantes a nivel nacional e internacional, Paz Errázuriz.
Son 170 obras y algunos videos, que se pueden visitar gratis en la sala Matta, en el subterráneo del museo.
Y fue a través de sus retratos de las calles después del Golpe de Estado del 73, que su carrera despegó.
Política por naturaleza, trabajadora de lo incómodo y lo difícil, la obra de Paz Errázuriz se enfoca en los márgenes de la realidad.
No le gusta que llamen “marginal” a su trabajo, sino que es más bien sobre la “gente que no sale en la tele”.
Y lo suyo fue plasmar rostros en blanco y negro de individuos que no encajaban en la sociedad convencional.
Entre ellos, personas de la calle, hombres y mujeres recluidos en psiquiátricos, artistas de circos pobres, y travestis, entre otros.
Y fue la línea que siguió siempre la fotógrafa de 74 años.
Muestra de nivel internacional en el Bellas Artes
Paz Errázuriz es parte de colecciones particulares y de museos como el Guggenheim, Moma y la Tate Modern.
Además, llevó su trabajo a la Bienal de Venecia 2015 y fue Premio Nacional de Artes Plásticas 2017; eso, sin contar el Premio Altazor en 2005.
Con todo ese mérito, el curador español Juan Vicente Aliaga seleccionó su fotografía más relevante en los últimos 40 años en 2015 y las llevó a la Fundación Mapfre, en Madrid.
Ahí estuvo con las 170 piezas que luego se fueron a Francia, México y que ahora llegaron al Museo de Bellas Artes.
La muestra se estructura en temáticas, como la de “Agentes y espacios del devenir social”.
En ella se ve sus imágenes de los que pasan a la intemperie, los que duermen en el suelo.
En tanto, en “Las edades de la vida (y la muerte)”, da cuenta de las edades extremas de la vida, la niñez y vejez.
Por eso, expone de ancianos desnudos, imágenes en las que deja ver su crítica al culto de la juventud y a la belleza.
Por otro lado, en “Reclusión”, retrata a los internos del hospital psiquiátrico de Putaendo.
Los retrata como personas desatendidas por sus propias familias, pero llenas de gestos de cariño entre ellos.
Y pese a que hay varios ejes más, destaca “El sexo, instrumento de supervivencia”, en que se aprecia parte de la serie La Manzana de Adán.
Son fotos que tomó entre 1982 y 1987 a hombres que se travestían y prostituían en distintos burdeles de Santiago y Talca.
El comienzo sin Paz
Antes del Golpe del 73′, Paz Errázuriz era profesora en un colegio, uno que cerraron y la dejó en la calle.
Eso la llevó a tomar una cámara y empezar a ver cómo ganarse la vida.
Por eso, en forma didáctica y movida por la necesidad imperiosa de documentar lo que estaba pasado en las calles en dictadura, empezó a “disparar”.
En los 80 se forjó su carrera.
Fue cofundadora de la Asociación de Fotógrafos Independientes, AFI, y colaboradora de la revista Apsi, entre otras.
Y con llegada la democracia, Errázuriz profundizó en su lado feminista y empezó a visibilizar el trabajo de las mujeres chilenas.
HORARIO: Martes a domingo, de 10 AM a 6.45 PM
ESTACIONAMIENTO: Merced 317, $ 35 el minuto.
Museo Nacional de Bellas Artes
Dirección
José Miguel de la Barra 650
Santiago,
Chile
Teléfono
Website
Horario
Martes a domingo, 10 AM a 6.30 PM
Estacionamiento
En Merced 317, $ 35 el minuto.
Edad
Todo público.
Con Reserva
No