Todas las noches este parque se enciende con las intervenciones de luces que representan a la flora y fauna chilena y que, además, tienen sonidos y movimientos. Y la entrada es liberada.

---

Por este fin de año el Parque de las Esculturas está abriendo durante las noches de manera inédita y por un evento especial, Proviluz.

Así se llama el espectáculo interactivo de luces que está iluminando este pulmón verde, el que organiza la Fundación Cultural de Providencia y que ofrece un entretenido panorama familiar, ideal para ir ahora que los niños y niñas salieron de vacaciones.

El que se puede ver todas las noches desde el 13 hasta el 23 de diciembre y que lleva a un colorido por Chile y su flora y fauna.

Eso, porque los árboles del parque se convierten en el telón de fondo en donde se proyectan ilustraciones en gran formato de animales, árboles y plantas, a través de un intervención de mapping.

Las que se basan en más de 50 ilustraciones dibujadas por la ilustradora Carla Infanta y que en Proviluz cobran vida a través de coloridas luces y también sonidos.

Por eso si lo recorres te sentirás como en el bosque o el mar, ya que la idea es ofrecer una experiencia visual y sonora que lleve a los asistentes a viajar imaginariamente hacia esos lugares y que también aprendan más sobre sus ecosistemas.

Y todo con entrada gratis, sin reservas y abierto para todas las personas, vivan o no en la comuna.

La flora y fauna se enciende

Ojo, que el Parque de las Esculturas cierra en las tardes, pero por este evento reabre a las 9 PM y hasta las 11.30 PM.

En ese horario puedes ir a recorrer Proviluz y sus intervenciones de luz que se proyectan sobre las copas de los árboles y también sobre algunas esculturas del lugar.

Así, te vas a encontrar con aves como el chucao, la golondrina y el pájaro carpintero, además de mamíferos como el chungungo, el zorro y la ballena colorada y anfibios como la ranita de Darwin y el sapo de rulo.

También con varias especies representativas de la flora chilena, como canelo, ciprés de la cordillera, coigüe, maitén, maqui y quillay, entre otros.

Lo mejor de todo es que, además de sonidos, las proyecciones de luces tienen movimiento, por eso apreciarás al pajáro carpintero picoteando un tronco o a la ranita de Darwin inflando su pecho, por ejemplo.

Además, en el anfiteatro de la sala de exposiciones del parque te encontrarás con una especie de laguna donde hasta saltan pesces, todo hecho con luces.

Revisa también esta guía con más panoramas gratis para hacer en Santiago.