Hoy se vivirá una verdadera gala que  rinde honores al arte popular chileno de los chinchineros y organilleros. Se reunirán 15 de las aproximadamente 20 familias que continúan con la tradición, y harán una presentación estilo circense en la Plaza Oriente del Centro Cultural Gabriela Mistral.

“La Gala del Chinchín y el Organillo” se denomina el evento que se enmarca en el lanzamiento de la nueva página web del colectivo Patrimonio Sonoro, que pretende ser una plataforma de difusión de estos oficios y fortalecer esta expresión genuinamente nacional.

“El oficio peligra porque surge desinterés, o nuevos intereses, y porque también es difícil ya que se construye en la calle”, asegura Pablo Vega, chinchinero y uno de los fundadores del colectivo. Además es parte de Bombo Trío, única agrupación que sale de la norma al no formarse por tradición familiar, sino por admiración a tradición.

En general, el oficio de organillero o chinchinero se trasmite de generación en generación. Dentro de las familias que se presentarán, se encuentran algunas que van hasta en la cuarta generación, como la de Tito Lizama, que con sus 85 años, tocara junto a su bisnieto de 15.

También podrá ver al pequeño Cristian, parte de los “Cifuentes”, que con solo cuatro años, mostrará su gran habilidad con el chinchín tirapié y su experiencia en la calle.

La presentación simulará la que comúnmente hacen en las plazas. La idea es que el público forme un ruedo alrededor de los artistas que se presentaran de dos a tres minutos por familia. Serán 40 minutos guiados por el cantor popular, Pavel Aguayo, que hará de “Señor Corales”, interviniendo entre cada acto, para destacar las características más importantes de cada grupo, recitando coplas, liras, décimas o cuecas.

El cierre estará a cargo de Bombo Trío, que se presentará junto al “Tío Yeyo”, clásico organillero de Valparaíso que, con más de 45 años en este trabajo, recorre los cerros con el organillo en el hombro vendiendo sus remolinos o chicharras.

Un evento gratuito e inédito,ya que es primera vez que los exponentes de este arte se juntan para celebrar su oficio. Le entrada es gratuita y la cita es las 8.30 PM en la Plaza Oriente del GAM.

EL CHINCHÍN Y EL ORGANILLO

El chinchín, patrimonio cultura intangible de Chile, surge en la zona central del país hace más de cien años. Posee un “tambor de dos caras usado en la espalda, junto a un par de platillos y un triángulo que son percutido por un par de varillas, tradicionalmente de mimbre, además del tirapié, lazo de cuero accionado por el pie para percutir los instrumentos de metal acoplados en la parte superior del bombo”, explican en Patrimonio Sonoro.

En general se tocaba con la base del organillo, instrumento de viento que llegó desde Europa a mediados del siglo XIX. Es accionado de forma manual, moviendo un rodillo que da paso a los foxtrot, tangos, tonada o incluso cuecas que suenan en sus recorridos por las calles. Estos se sustentan generalmente por la venta de juguetes como chicharras, sapitos o remolinos. En cuanto al chinchín, suelen pedir aportes a los transeúntes.