La industria audiovisual italiana se ha convertido en una de las principales proveedoras de títulos juveniles para Netflix, desde el suspenso de Curon hasta el drama de En la misma ola. Un listado al que ahora se suma Cero con su mezcla de juventud, acción y conflictos.
Una serie que tiene como inspiración libre a Nunca he tenido mi edad, la novela publicada en 2018 por Antonio Dikele Distefano, escritor italiano hijo de padres angoleños, que narra la historia de un tímido muchacho con un extraordinario superpoder.
La que ahora llega al streaming convertida en un espacio que a lo largo de sus ocho episodios relata la singular historia de Omar (Giuseppe Dave Seke), un chico que vive en un barrio de inmigrantes, en los suburbios de Milán, llamado simplemente El Barrio.
Aquí él habita un departamento con su hermana adolescente Awa (Virginia Diop) y su padre, mientras reparte sus días entre el trabajo como repartidor de pizzas y su verdadera pasión: dibujar historietas, estilo manga japonés, cuyos protagonistas son héroes negros.
Pero las cosas comienzan a cambiar de improviso. Casi al mismo tiempo conoce a una vivaz estudiante de arquitectura llamada Anna (Beatrice Grannò), cuando le lleva unas pizzas, y alguien descubre el extraño poder que posee: el hacerse invisible.
Este último es Sharif (Haroun Fall), un joven vecino que decide acercarse a Omar, o Cero, como lo bautiza al ver uno de los personajes de sus cómics, para que lo ayude a él y a su grupo de amigos a juntar el dinero que se necesita para recuperar la electricidad del barrio.
Un grupo que busca salvar su barrio
Y lo que comenzó como un pequeño chantaje se convierte en un gran cambio para Omar, ya que no solo se hace amigo de Sharif y sus compañeros -Sara (Daniela Scattolin), Momo (Dylan Magon) e Inno (Madior Fall)-, sino que le encuentra un nuevo sentido a su vida.
Esto después de que el grupo descubre que detrás de los últimos actos criminales en El Barrio, que incluyen la muerte de un indigente, los incendios de locales y la destrucción de motonetas de sus habitantes, está la pandilla liderada por Rico (Miguel Gobo Diaz).
Sin embargo, eso no es lo peor. Lo más grave es que detrás del accionar de este matón se encuentra la compañía inmobiliaria Sirenetta, empresa que ha decidido amedrentar a los vecinos del sector para conseguir a bajo precio los terrenos de su nuevo proyecto.
Una grave revelación que hará que Omar, o Cero, haga uso de su poder de invisibilidad para descubrir pistas y desenmascarar a los villanos de la historia; mientras enfrenta varios problemas personales, como la desaparición de su madre y un amor casi imposible.
Así, apostando por un particular protagonista, que es más que nada un héroe que ayuda a sus pares, Cero va dibujando una historia que mezcla la acción, con el drama y la juventud. Una combinación que suena a más de lo mismo, pero acá adquiere un renovado aspecto.
El que es dado por personajes cercanos, encarnados con gran carisma por sus noveles actores, junto a un guión de diálogos creíbles y cercanos. A lo que se suma el atrapante ritmo de su relato y el rap en italiano y francés que acompaña musicalmente a la serie.