Dieciocho otra vez: la inusual comedia sueca de Netflix con un aleccionador viaje al pasado
Jonatan Etzler es el director del largometraje donde una mujer de 40 años tiene un grave accidente que la transporta a su cumpleaños número 18 una y otra vez, enfrentándose a un reencuentro con lo bueno y malo de su juventud.
Mientras en las cintas Si tuviera 30 y Quisiera ser grande, los personajes de Jennifer Garner y Tom Hanks pasaron de niños a adultos, a la protagonista de Dieciocho otra vez le ocurre lo contrario.
Ya que en la cinta sueca de Netflix, dirigida por Jonatan Etzler, su personaje principal deja de improviso la adultez para reencontrarse con los despreocupados días de su adolescencia.
Una drástica y repentina vuelta a la juventud que es el corazón de una cinta que apuesta por la comedia mezclada por el drama, a lo largo de 85 minutos de una rápida y singular narración.
La que se inicia con Amelia (Tindra Källström) en medio de su fiesta de 18 años, a comienzos de los 2000, cuando su grupo de amigos la celebra y le afirman que su futuro será prometedor.
Sin embargo, los años pasaron sin grandes sucesos y luego de un percance que la deja mojada, Amanda (ahora interpretada por Hedda Stiernstedt) pierde su trabajo en una tienda de ropa.
Lo que ocurre precisamente en su cumpleaños 40, cuando además se encuentra con su amiga de infancia Fiona (Tove Edfeldt) y decide buscar la “lata del tiempo” que enterraron siendo niñas.
Su cumpleaños número 18 una y otra vez
En la que encuentra el papel donde escribió que en su futuro deseaba ser popular, pero no alcanza a leer lo que dejó escrito Fiona, ya que es atropellada por un camión a toda velocidad.
Pero el accidente no la lleva a un hospital, sino que de vuelta a su juventud y precisamente al día con que comenzó la narración del largometraje: el de su cumpleaños número 18.
Donde mantiene sus recuerdos de adulta -aunque la ven como adolescente-, sus padres la despiertan con una festiva canción y además la visita su amiga Moa (Elinor Silfversparre).
Para luego reencontrarse con la escuela, compañeros y su novio Max (Maxwell Cunningham), en la que ella piensa fue la mejor época de su vida. Sin embargo, su felicidad dura poco.
Ya que al dormir, vuelve a despertarse en el mismo día, una y otra vez, complicando cada vez más lo que ocurre en esa jornada. Aunque ocurre algo bueno: se reencuentra con Fiona (Miriam Ingrid).
La que trata de ayudarle con su bucle temporal mostrándole la cinta El día de la marmota (¡!), aunque a Amelia le queda mucho por soportar en lo que resta de la inusual y entretenida Dieciocho otra vez.
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