Dilema (What/If) es la nueva serie de Netflix con 10 capítulos largos (de más de 45 minutos cada uno), cargados de misterio y secretos. La protagonista es Renée Zellweger en el rol de Anne Montgomery, una mujer millonaria y maquiavélica que aparece en la vida de varios como una especie de suma sacerdotisa.
Una tipa manipuladora y filosa que, en persona y por escrito como autora de un best seller, viene a advertirle al resto que sus propias decisiones, por pequeñas que sean, pueden marcar sus vidas.
Su contraparte es Lisa (Jane Levy), una bióloga que lucha porque la compañía que ha creado, una empresa con la que pretende salvar la vida de millones de niños, logre financiamiento y sobreviva.
Anne le hace a Lisa una propuesta intrigante que involucra a su guapo y joven marido (no diremos más para no spoilear). A cambio, le dará el dinero suficiente como para que su compañía salga a flote y consiga su loable propósito de salvar vidas.
A lo largo de los episodios van surgiendo otras historias anexas —protagonizadas por amigos de la pareja central— que también hablan de dilemas y decisiones que cambian el rumbo de los acontecimientos.
Un thriller oscuro
Creada por Mike Kelly —el mismo de la aclamada Revenge—, la serie atrapa y sorprende. Al principio confunde, lo que es una gracia para mantener la expectación y querer avanzar para saber qué más pasará y cuáles son las reales intenciones de Anne.
En eso se nota la mano del director, Phillip Noyce, que ha estado a cargo de thrillers bien logrados, como El coleccionista de huesos y Terror a bordo.
Aunque es un poco lenta, la trama se sostiene y transforma a Dilema en una buena y oscura propuesta de Netflix. Más aún para los admiradores de Renée Zellweger, que con esta producción retorna en grande.