A pesar de que la que recién pasó no fue una buena semana de estrenos en Netflix, sobre todo por la llegada de la decepcionante serie La Orden Secreta, el gigante del streaming mundial lanzó una joyita que los fanáticos del deporte motor agradecerán.
Se llama Formula 1: La emoción de un Grand Prix (en ingles: Formula 1: Drive to Survive) y, tal como dice su nombre, es una serie documental de 10 episodios que logra colarse, para conseguir una mirada exclusiva, en el tras bambalinas de uno de los deportes motorizados más importantes del mundo.
Detrás de su realización están James Gay-Rees y Paul Martin, los productores de otros documentales exitosos, como Amy, dedicado a la cantante británica Amy Winehouse, y Senna, que narra la vida del brasileño Ayrton Senna, uno de los pilotos más grandes en la historia de la Formula 1.
Historias veloces, carreras peligrosas
Lo primero que hay que decir es que esta serie documental está pensada para fanáticas y fanáticos de este deporte motor. Eso porque se adentra directamente, y sin hacer introducciones técnicas sobre la Formula 1 y sus carreras, a los distintos equipos que dan vida a la competencia.
Así que, si no conoces la jerga y los tecnicismos propios de este deporte, te recomendamos leer alguna guía en la web para aprenderlos antes de comenzar a disfrutar como corresponde de esta electrizante docuserie.
Todo comienza con la preparación del piloto Daniel Ricciardo —y de otros varios pilotos— antes del Gran Premio de Australia, la carrera que dio inicio a la temporada 2018 de la Formula 1.
Ahí podemos ver los duros entrenamientos a los que se someten los pilotos y el arduo trabajo que realizan a diario, para que todo salga a la perfección durante la carrera, los equipos y familias de cada escudería.
Cada episodio se centra en una carrera en particular, hasta llegar a la que cierra la temporada 2018 en Abu Dabi, donde el piloto británico Lewis Hamilton se coronó como campeón. En ellos también podemos seguir de cerca a pilotos como Fernando Alonso de McLaren y Carlos Sainz Jr. de Renault.
Ojo que la serie no cuenta con imágenes de Ferrari ni de Mercedes, ya que ambas escuderías no accedieron a ser filmadas por Netflix. Eso sí, como publica 20minutos.es, estos sí serían parte de una segunda temporada a estrenarse en 2020.
Una serie rápida de ver y bastante entretenida, pero que a ratos peca de ser demasiado técnica y de forzar algunas situaciones para mostrar un drama algo más sabroso aunque no lo sea, dejando lo electrizante de este deporte en un segundo plano.
Uno de sus puntos más altos es, como todo buen documental realizado por James Gay-Rees, la exquisita fotografía y un montaje veloz que logra mantener atento al espectador en todo momento.