La casa de papel ya dejó en claro que el público de Netflix adora las historias de grandes atracos. El mismo que de seguro disfrutará cada segundo de El robo del siglo, el nuevo y espectacular asalto que llega a su catálogo.

Eso sí, el de esta serie colombiana, que se estrenó hoy, se basa en un hecho real, el del asalto a un banco más grande ocurrido en el país cafetero. Es más, es el robo de dinero en efecto más cuantioso de toda la historia.

En total, los ladrones lograron llevarse del Banco de la República, en la ciudad Valledupar, más de $ 24 mil millones de pesos mexicanos, equivalente a US$ 33 millones de dólares en 1994, así que ya pueden dimensionar lo que ese dinero valdría hoy.

Un robo de película, que merecía llegar a la pantalla y lo hace ahora con los seis capítulos de esta serie que si bien parte un hecho verídico, se toma varias licencias para ficcionar la historia.

Por ejemplo, en la planificación y en el atraco mismo no participó ninguna mujer, pero en El robo del siglo sí hay una y de caracter fuerte, Doña K (Marcela Benjumea), quien es el nexo con los financistas de la operación.

Es uno de los personajes claves del asalto junto a Chayo (Andrés Parra, El presidente) y “El abogado (Christian Tappan), dos viejos amigos y socios que se vuelven a encontrar tras participar en otros robos, el último de ellos fallidos.

También es el reencuentro de estos dos actores, que todo el mundo conoció en Escobar, el patrón del mal, donde Tappan interpretaba al primo del líder del Cartel de Medellín, un rol que marcó para siempre a Parra.

Robo de película

Fue un atraco de película dijimos antes y El robo del siglo logra transmitir toda la espectacularidad que implicó la operación.

Lo primero que sorprende es la organización que hay detrás de un asalto de este tipo, un verdadero sistema casi empresarial que implicó meses de preparación, tanto para financiarla como para encontrar a los hombres que la llevarían a cabo.

Si hasta se tuvieron que importar herramientas del extranjero para poder romper la bóveda donde se guardaba el  botín, una de las más segura del mundo. O eso al menos se creía hasta octubre de 1994.

Así, reunieron a una banda de asaltantes variada, algunos más despiertos que otros, entre los que están Estiven y El Sardino, cercano al Chayo y a Doña K, además de uno de los policias encargados de cuidar el banco.

Los primeros episodios muestran la planificación milimétrica y el infartante robo, pero lo mejor viene después, cuando se recrea cómo lograron transportar por tierra seis toneladas de billetes desde Valledupar hasta Bogotá, dos ciudades que las separan más de 800 kilómetros.

Y todo eso considerando que en ese momento todo el mundo andaba tras el dinero, desde la policia y los militares, hasta guerrilleros y ladrones comunes.

Una aventura que el creador Camilo Prince lleva a la pantalla en un relato entretenido, lleno de tensión y con algo de humor, que atrapará a los fanáticos de las historias de grandes crímenes.

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