Hace poco Queen Latifah volvió a los originales de Netflix, tras ser parte de series como Hollywood, en el rol de la esposa de Adam Sandler en la cinta Garra. Un reencuentro que hoy reafirma con Final del camino.
La cinta de la plataforma con la que además Millicent Shelton debuta como realizadora de un largometraje, después de años detrás de los capítulos de famosas series como 30 rock, Black-ish y Empire.
Labor en la que dirige a Latifah en su interpretación de Brenda Freeman, una madre de familia que enfrenta dificultades en las antípodas a las que encaró junto a Sandler en la comedia deportiva.
Porque ahora en el papel una viuda y mamá de dos hijos es el motor de un recorrido fílmico que se mueve entre el suspenso, la acción, el drama familiar y la road movie, donde todo va de mal en peor.
El cual se inicia cuando Brenda, luego de tener problemas financieros, ha decidido volver a la casa de sus padres, en compañía de la adolescente Kelly (Mychala Lee) y el pequeño Cam (Shaun Dixon).
Un viaje de tres días que también incluye a su torpe hermano Reggie (Chris “Ludacris” Bridges) y que los llevará desde su antiguo hogar en Los Angeles hasta la lejana Houston, cruzando Arizona.
El peligro acecha a Brenda y su familia
Pero al mismo tiempo que la familia inicia su recorrido, el público es testigo de cómo en medio del desierto un hombre se apodera del dinero que debía entregar a su jefe, claramente un criminal.
Un hecho que será crucial en lo que marcará un antes y un después en la vida de Brenda y su familia, luego de encarar dificultades con algunos racistas al tener que desviarse de la carretera principal.
El que se desarrolla en el motel en que se alojan, después de que escuchan una pelea y un disparo, además de un auto que escapa. Cuando descubren a un individuo herido en el cuarto contiguo.
Al que Brenda como enfermera trata de salvar antes de que muera y es, como ya lo sabe el espectador, el mismo que tomó el dinero hace un par de escenas. Una pequeña fortuna que viene del Cártel de Sinaloa.
Como lo hace saber a quien lo escuche el Capitán Hammers (Beau Bridges) cuando llega a investigar el crimen, aclarando que quienes escucharon la voz del asesino -Brenda y su familia- están en peligro.
Un peligro que se acrecienta cuando se descubre que Reggie tomó el dinero del cártel, lo que los expone a ser asesinados. A lo que se suma un secuestro y la revelación del verdadero villano.
Lo que sucede de manera rápida y predecible, pero no resta a Final del camino el poder captar la atención y entretener, en especial por la capacidad de Latifah de moverse entre drama, acción y algo de comedia negra.