En los últimos años, Jennifer Garner dejó atrás sus activos días en series y películas de acción -como Alias y Elektra– para convertirse en una de las actrices que más se relaciona con el rol de mamá en Hollywood. Algo que repite en ¡Hoy sí!, la nueva comedia de Netflix.

Una cinta donde ella se pone nuevamente bajo la guía del realizador puertorriqueño Miguel Arteta -quien ya la dirigió en Alexander y un día terrible, horrible, malo… ¡muy malo! (2014)- para encarnar a Allison, quien en su juventud casi siempre tenía un sí por respuesta.

Una forma de enfrentar la vida que la hacía disfrutar de desafíos como saltar en paracaídas o tomarse el café de un desconocido. Manera en la que conoció a Carlos Torres (Edgar Ramírez), en quien encontraría a un “compañero de sí” y a su futuro marido.

Y el que además se convertiría en el padre de sus tres hijos. Pero la llegada de estos últimos logró lo imposible: que Allison y Carlos hicieran del “no” la palabra preferida para controlar a sus niños. Aunque ella sea finalmente la que pone las reglas en casa.

Un papel que ha hecho que la adolescente Katie (Jenna Ortega), su hermano Nando (Julian Lerner) y la pequeña Ellie (Everly Carganilla) vean a su mamá como una “carcelera” o “dictadora”, como se lo hacen notar a Allison dos profesores del colegio de sus hijos.

Algo que para ella es injusto, ya que debe mantener el orden en el hogar mientras su marido trabaja y llega en las noches para ser el “papá simpático”. Pero este le recuerda que su labor profesional lo ha convertido en el menos popular de su empresa.

Una prueba para enfrentar en familia

Sin embargo, alguien más escucha su conversación y les entrega un consejo. Es el Sr. Deacon (Nat Faxon), orientador y entrenador escolar que les habla sobre el día del “hoy sí”, jornada en que los padres sólo responden afirmativamente a las peticiones de sus hijos.

Un método que mejoraría su relación familiar y que los Torres deciden poner en marcha. El que en su caso además involucra una apuesta entre Allison y Katie: si su madre dice no en algún momento de dicha jornada, ella podrá ir sola a un concierto con su mejor amiga.

Pero para ganarse ese día, los hermanos deben portarse bien en casa y subir sus notas en el colegio. Algo que los chicos logran con facilidad y que hará a Carlos y Allison enfrentar una jornada con los más inusuales desafíos, en distintos lugares de la ciudad.

La que además permitirá a los chicos conocer otra dimensión de sus padres, como el lado más positivo y enérgico de su madre, o la faceta más seria de su papá, quien también deberá poner a prueba su capacidad para estar lejos de su celular y la oficina.

Todo bajo una mirada sencilla y positiva, que le saca el mayor partido a la faceta maternal y cálida de Jennifer Garner, y le permite a Edgar Ramírez probar un protagónico en una cinta familiar, lejana a los papeles que hasta el momento había realizado en dramas y thrillers.

Lo que convierte a ¡Hoy sí! en una película poco ambiciosa, que ofrece algunas lecciones sobre crecimiento y confianza. Y que apuesta simplemente por pasar un buen rato en familia, dejando atrás por una hora y media las complicaciones que varios tienen por estos días.

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