Entre los títulos sobre desastres que llegan a la pantalla, se cuentan muchos sobre hechos causados por el hombre, pero también títulos como Los días donde la naturaleza provocó una catástrofe.
Ya que el espacio japonés de Netflix, dirigido por Masaki Nishiura y Hideo Nakata, revive el drama que se vivió en la central nuclear Fukushima I, tras el terremoto y tsunami de marzo de 2011.
Los que afectaron a la costa noreste de Japón y desencadenaron la liberación de contaminación radiactiva, al nivel del accidente de Chernóbil de 1986, que también inspiró una serie.
Y si bien la producción nipona no iguala el nivel de producción de la aplaudida pieza con la firma de HBO, sí logra revivir la intensidad del más catastrófico accidente nuclear en lo que va del siglo.
Lo que realiza en ocho capítulos que se desarrollan a través de siete días y muestran los sucesos desde tres puntos de vista diferentes, de personas relacionadas con el incidente.
El tsunami llega a Fukushima
Así, aborda lo experimentado por funcionarios del gobierno, empleados de la Tokyo Electric Power Company, que operaba el lugar, y trabajadores de la central nuclear de Fukushima Daiichi.
En una dramatización que se inicia con el día uno, el 11 de marzo de 2011, cuando todos trabajaban normalmente en el edificio administrativo principal sin imaginar lo que estaba por ocurrir.
Entre ellos el jefe de la central, Masao Yoshida (Koji Yakusho) que da instrucciones a sus empleados cuando comienza el fuerte terremoto, mientras en la sala de control se activan las alarmas.
Al mismo tiempo que los funcionarios de la sección revisan los sistemas de emergencia y la activación del enfriado de los reactores, que al parecer funcionó de la mejor manera.
Mientras en Tokio, el Primer Ministro decide detener una sesión de trabajo para enfocarse en conocer la magnitud del desastre y en las oficinas de la compañía eléctrica también toman medidas.
El desastre despierta las alarmas
Un procedimiento que busca evitar el cese de la electricidad, ya que ante el sismo la mayor parte de sus centrales nucleares se detuvieron. Sin embargo, Fukushima será doblemente afectada.
Ya que el poderoso tsunami que sigue al terremoto inunda sus reactores, los sistemas de emergencia quedan desactivados, no funciona la refrigeración y se produce un apagón total.
Una situación sin precedentes por lo que no existe un plan de contingencia, comenzando a elevar la tensión entre los funcionarios a cargo, como también en el gobierno, que decreta emergencia nuclear.
Pero lo peor está aún por venir, porque los niveles de radiación comienzan a subir y ponen en jaque a todos los involucrados en la trama: empleados, políticos y la población en general.
Lo que Los días retrata con extremo detalle, haciendo que su narración se torne algo lenta, lo que la serie compensa con la buena recreación del desastre natural y el caos posterior que genera.