Gracias al streaming, famosos realizadores encontraron una vitrina para sus trabajos como también el lugar para probar diferentes formatos, como en el caso de Makanai: la cocinera de las maiko.
La serie que marca el debut del director japonés Hirokazu Kore-eda en Netflix, con un espacio que lleva a acción real el manga Maiko-san chi no makanai-san, escrito e ilustrado por Aiko Koyama.
Un salto de las páginas de una historieta a la pantalla que el cineasta ya había probado con sus cintas Nuestra hermana pequeña o Umimachi diary, también basadas en cómics japoneses.
Una labor que ahora el realizador de películas como Nadie sabe y Somos una familia, además de favorito de festivales como el de Cannes, efectúa en el rol de showrunner, guionista y director.
Último papel que comparte con colegas como Hiroshi Okuyama a lo largo de los nueve episodios que conforman el conmovedor y cálido espacio que tiene como escenario una casa de geikos.
Como también se les conoce a las geishas o profesionales del entretenimiento que, en el caso de esta serie, habitan en una morada ubicada en Saku, en la ciudad de Kioto contemporánea.
La llegada de Kiyo y Sumire a Kioto
Mismo lugar donde al comienzo del relato llegan las jóvenes amigas Kiyo (Nana Mori) y Sumire (Natsuki Deguchi) desde su poblado natal, para llegar a ser maiko o aprendices de geiko.
Pero pronto es claro que es Sumire la que innatamente tiene las condiciones para llegar a ser geisha, a diferencia de Kiyo que no tiene mucha habilidad en las disciplinas artísticas y es algo distraída.
Ante lo que Madre Azusa (Takako Tokiwa), una de las encargadas de la casa, le dice que mejor vuelva a su pueblo. Sin embargo, un giro del destino hace que Kiyo se convierta en la makanai.
Es decir, la encargada de la comida para maiko y geikos, transformando la cocina en el escenario en que desarrolla su talento, elaborando platos simples que reconfortan el espíritu de sus “hermanas”.
Y es aquí que la serie despliega bellas escenas donde se ve cómo cada día la positiva jovencita prepara con paciencia y destreza, mientras a su alrededor se amplía el foco de la narración.
Donde también se conoce más sobre la geisha Momoko (Ai Hashimoto) y la taciturna hija adolescente de Azusa, Ryoko (Aju Makita), además de diferentes figuras en torno a la casa de las maiko.
Sin olvidar nunca la amistad que une a las protagonistas de esta cálida e imperdible Makanai, y cómo esta las ayuda a enfrentar cada uno de los pequeños y grandes desafíos que enfrentan a diario.