Matrimillas: la comedia argentina de Netflix donde una aplicación cambia la rutina de un matrimonio
Luisana Lopilato y Juan Minujín protagonizan la nueva cinta original de la plataforma que, bajo la dirección de Sebastián De Caro, muestra cómo una pareja hace de su relación una competencia.
La industria fílmica argentina es una de las más activas de hispanoamérica, con la comedia como uno de los géneros con mayor exposición, teniendo como uno de sus últimos ejemplos a Matrimillas.
La nueva película original transandina de Netflix que se une a Granizo, la humorística cinta con Guillermo Francella como un meteorólogo, que se convirtió en uno de los títulos más vistos de la plataforma.
Y lo hace apostando a la comedia y el romance, con varios desencuentros, además de una aplicación que promete cambiar la relación de la pareja protagónica del filme dirigido por Sebastián De Caro.
El que se inicia cuando ellos se conocen debido a un accidente: cuando un distraído Federico (Juan Minujín) choca y saca la puerta trasera del auto que recién había comprado Belén (Luisana Lopilato).
Para años después mostrarlos casados y como padres de la adolescente Mica (Aylén Malisani) y el más pequeño Toto (Vicente Archain), mientras se preocupan de sus respectivos trabajos.
Él como odontólogo, al igual que sus padres y abuelo -a pesar que su sueño es ser chef-, y ella a cargo de la tienda de juguetes que comparte con su socia y mejor amiga Juana (Agustina Suásquita).
La competencia para sumar millas
Sin embargo, los pequeños detalles diarios han comenzado a hacer salir a flote pequeñas complicaciones entre Belén y Fede, en especial por la actitud despreocupada de este ante el manejo de la casa.
Lo que hace a la protagonista seguir el consejo de su hermana de visitar Equilibrium, donde ella y su marido consiguieron ayuda para mejorar su matrimonio, que será el detonante de lo que vendrá.
Porque luego de conversar con la encargada del sistema, que implica el uso de relojes inteligentes que con una app registran las acciones que contribuyen al matrimonio, Fede decide pagar por este.
Lo que Belén agradece de corazón, ignorando que su marido quiere obtener las millas que se suman y restan en Equilibrium, para poder viajar a México con sus amigos a un concurso de cocineros amateurs.
Pero todo se sabe y cuando se entera del plan de Fede, ella busca sumar puntos para su propio viaje a la India, dando paso a una frenética competencia por ser el más preocupado y sentimental.
En una sucesión de situaciones que llevarán a la pareja y a Matrimillas hacia un final poco sorprendente, pero que no empaña el ritmo ni la simple entretención que son parte de esta comedia romántica.
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