Ocultos por la luna es una de las últimas producciones originales de Netflix estrenadas en septiembre de 2019. Una película policial de ciencia ficción llena de crímenes, asesinatos, misterio, acción y saltos en el tiempo, pero con una historia pretenciosa que no termina de convencer.
Los seguidores de la exitosa serie Narcos reconocerán rápidamente a su protagonista, porque es Boyd Holbrook, el actor estadounidense conocido por su papel como el agente de la DEA Steve Murphy durante la primera temporada, quien vuelve a Netflix para interpretar a un policía que a ratos luce exactamente igual que en la producción de 2016.
La historia
En el año 1988, el oficial de la policía de Filadelfia Thomas Lockhart (Holbrook), hambriento por convertirse en detective, comienza a seguirle la pista a un misterioso asesino serial que reaparece cada nueve años. Tras varias décadas de investigación, cuando los crímenes de este asesino comienzan a desafiar toda explicación científica, la obsesión de Lockhart por encontrar la verdad termina destruyendo su carrera, su familia y su salud mental.
Una historia llena de misterios, a ratos poco convincente, pero que a lo largo de las casi dos horas de duración del metraje, avanza sin temor y a buen ritmo saltando vacíos argumentales en beneficio de la acción en la pantalla, que debe ser unos de los mejores elementos de la producción.
Eso y el hecho de que su relato cuenta con giros nada predecibles, que cada 20 minutos aproximadamente, aparecen para dejar boquiabierto al espectador, profundizando aún más en la compleja y fantasiosa trama de la película.
Nada nuevo que ver
Es verdad que en días como los que vivimos es necesario reciclar, pero esto es algo que no debería aplicar para los argumentos de películas y series. Y es que últimamente el catálogo de producciones originales de Netflix ha comenzado a poblarse de títulos construidos en base a elementos copiados de forma muy poco sutil de historias más que vistas en el cine y la televisión.
Algo que se nota no sólo en la historia, sino también en los personajes. Pues el papel de Holbrook como el oficial Lockhart, por momentos luce y se expresa de la misma forma que el detective yankee de la serie Narcos.
Ocultos por la luna es una de esas películas que se “inspira” de manera muy evidente en otras historias. Es como una especie de Terminator de presupuesto moderado que, luego de una serie de giros impactantes y muy poco verosímiles, termina con un cierre al estilo de Interstellar (la banda sonora en esta parte es una copia casi idéntica) de Christopher Nolan, pero sin lograr aproximarse a su profundidad emotiva y narrativa.
Una película de suspenso y acción entretenida para ver un sábado en la tarde o por la noche si no hay otro panorama mejor (para que no pierdas tu tiempo, revisa aquí el ranking actualizado con las mejores películas del catálogo de Netflix).