Parasyte: Los Grises, la serie coreana de Netflix que ofrece una nueva mirada a un manga clásico
Yeon Sang-ho, el guionista y realizador de Rumbo al infierno, retorna al servicio de streaming con el espacio inspirado en Parasyte, el popular cómic japonés de Hitoshi Iwaaki donde parásitos extraterrestres se apoderan de los humanos.
Una de las grandes inspiraciones de las series hechas en Corea son los webtoons nacidos en su propio territorio. Sin embargo, con Parasyte: Los Grises se derriban fronteras.
Ya que la nueva serie surcoreana de Netflix se basa en un manga y nada menos que en Parasyte, de Hitoshi Iwaaki, uno de los más exitosos dentro de la historia del cómic japonés.
El que ha vendido millones de sus ejemplares alrededor del mundo y fue llevado a la pantalla en dos películas en acción real y el animé Parasyte: The Maxim, todos nipones.
Para ahora sumar un pasaje que busca ampliar la historia original de Iwaaki, con su misma combinación de horror y ciencia ficción, pero enfocado en nuevos personajes y situaciones.
Junto a un entorno renovado, ya que abandona la ciudad de Fukuyama, y a Shinichi Izumi y Migi -la mano del chico invadida por un parásito-, para ubicarse en la urbe coreana Namil.
En el mismo universo del manga, pero con la mirada que Yeon Sang-ho, el guionista y realizador de Estación zombie y Rumbo al infierno, da a la invasión parasitaria.
Su-in nunca volverá a ser la misma
Los pequeños visitantes extraterrestres que una noche se dejan caer literalmente sobre Namil, abandonando las esporas que los transportan para apoderarse de cuerpos humanos.
Primero los de algunos asistentes de una fiesta electrónica y después de otros habitantes de Namil, entre ellos la joven cajera de supermercado Jeong Su-in (Jeon So-nee).
La que tras ser atacada verbalmente por un comprador, termina su turno y se dirige a casa en su motoneta, pero es perseguida y atacada con un cuchillo por ese mismo cliente.
Una agresión grave que al parecer la deja al borde de la muerte, aunque cuando llega al hospital sus lesiones han desaparecido y además se entera que su atacante ha muerto.
En una cambio de su situación que, como pronto se revela, involucra a un parásito que la eligió como huésped, pero tuvo que curar sus heridas tras el asalto para sobrevivir.
Lo que impidió que se apoderara totalmente de su mente, pasando a convertirse en una visitante dentro del cuerpo Su-in, que solo por minutos se hace presente.
El Equipo Gris va tras Su-in
El momento en que Heidi, como es bautizada la intrusa, despliega su poder y aterradora apariencia, ya que los invasores se caracterizan por tener varios ojos y tentáculos mortales.
Lo que transforma a Su-in en una mutante que nunca pierde su personalidad y debe luchar por su vida en compañía del criminal de poca monta Kang-woo (Koo Kyo-hwan).
Esto luego de que El Equipo Gris, las fuerzas especiales creadas para acabar con la plaga alienígena, descubren su existencia y se convierte en el blanco principal de su jefa.
La que se llama Choi Jun-kyung (Lee Jung-hyun) y tras perder a su marido y una de sus orejas por culpa de un parásito, está enfocada en la destrucción total de la mortal plaga.
Al mismo tiempo que el líder de los “visitantes” ha decidido aumentar su poder y la serie adquiere aún más ritmo, con una sucesión de enfrentamientos y situaciones de peligro.
Todas enmarcadas por una combinación de horror, ciencia ficción y violencia, además de buenos efectos especiales para dar vida a los amenazantes parásitos de su relato.
Los ingredientes de un singular y efectivo espacio coreano que en seis episodios sorprende, asusta y entretiene, y además posee una escena final con un particular invitado.
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