La espera ha llegado a su fin y tras algo más de cinco semanas de conocer el denominado Volumen 1 de la cuarta temporada de Stranger things, debutan en Netflix los dos últimos episodios de su antepenúltimo ciclo.
Los cuales a lo largo de una hora y 25 minutos y dos horas y 20 minutos, respectivamente, vienen a cerrar una entrega que ha redoblado la fantasía y el peligro que siempre han sido parte del espacio de Netflix.
Un cierre muy intenso y oscuro que, como corresponde, es dirigido y escrito por los Hermanos Duffer, los responsables de la creación de uno de los títulos más exitosos del streaming gracias a su ficción y nostalgia.
Los que responden interrogantes como si Max (Sadie Sink) logrará evitar la maldición de Vecna y si Eleven (Millie Bobby Brown) recuperará todo su poder para ayudar a sus amigos a combatir a este maligno ser.
El cual en las escenas finales de la primera entrega se supo quién era: Henry, el niño que debido a su capacidad psicoquinética se convirtió en el número Uno de los experimentos del Dr. Brenner (Matthew Modine).
Quien al crecer -encarnado por Jamie Campbell Bower- se transformó en empleado de Brenner hasta que recuperó sus poderes y trató de matar a todos en el laboratorio, antes de que Eleven, o El, lo enviara al Otro Lado.
Los distintos relatos de la trama
Y es en ese instante que parte el relato del segundo volumen, para luego mostrar cómo Vecna pone en la mente de Nancy (Natalia Dyer) apocalípticas imágenes del futuro para que le hable de ellas a El.
Una revelación que despierta las alarmas en la chica y sus amigos en Hawkins, haciendo que elaboren un plan para volver a El Otro Lado y eliminar a Vecna, en una de las narraciones paralelas de esta temporada.
A la que se suma el viaje que realizan Mike (Finn Wolfhard), Jonathan (Charlie Heaton), Will (Noah Schnapp) y Argyle (Eduardo Franco) para dar con el paradero de Eleven, mientras ella decide dejar el laboratorio.
Al mismo tiempo que en una cárcel de la Unión Soviética, Joyce (Winona Ryder) y Murray (Brett Gelman) ayudan a Jim (David Harbour) y su nuevo amigo Enzo (Tom Wlaschiha) a combatir al Demogorgon.
Lo que pone en marcha una serie de peligros para todos los protagonistas del espacio, que probarán su inventiva y valentía, además de exponer sus sentimientos, llevando a un cierre marcado por el dolor.
Todo lo que se desarrolla en un entorno muy oscuro y dramático, donde son claves las actuaciones de Brown y Sink, como también el que quede establecida la premisa para la quinta temporada y final de Stranger things.