The Dirt comienza con una escena que bien podría ser el trailer de la película: una fiesta post concierto, en una casa en donde abunda el sexo, las drogas y, sobre todo el rock & roll.
Y es que eso es lo que hay en este biopic de Netflix que lleva a la pantalla la historia de Mötley Crüe, la banda metalera que se formó en 1981 en Los Angeles, California,
Juntos a grupos como Van Halen y Def Leppard, fueron uno de los más exitosos del glam metal, ese estilo influenciado por el metal y el glam y que, además de guitarras pesadas, tenía mucho maquillaje, pantalones de cuero ultra ajustados, botas vaqueras y largas cabelleras.
En esta película están los peinados más horribles jamás vistos y también todos los lugares comunes estilo de vida de rockero, ese del sexo, las drogas y el rock & roll.
Y aunque parezca cliché, todo lo que se muestra ahí es 100% real, porque se basa en The Dirt: confessions of the most notorius rock band, la autobiografía de Mötley Crüe.
Por lo mismo, está plagada de detalles y situaciones surrealistas que sólo podrían haber salido de la cabeza de los integrantes del grupo.
Aunque, ¿fue real esa tarde junto a la piscina de un hotel en que Ozzy Osbourne se puso a aspirar hormigas con una bombilla?
Girls, girls, girls
En una escena de The Dirt se presenta a Mötley de manera breve, precisa y magistral: “hay un viejo, un chico baterista, un cantante de covers y un fugitivo”.
El “viejo” es el guitarrista Mick Mars (interpretado por Iwan Rheon, el malvado Ramsay Bolton de Games of Thrones), el baterista es Tomy Lee (el actor y rapero Machine Gun Kelley), el “cantante de covers” es el vocalista Vince Neil (Daniel Weebber) y el “fugitivo” es Nikki Sixx (Douglas Booth).
A comienzos de los 80, los juntó su amor por el rock, pero sobre todo sus ganas de conseguir chicas facilmente.
Y vaya que lo lograron, porque durante las casi dos horas que dura The Dirt estos rockeros no paran de tener sexo. No importa si es un restaurante o en sus camarines: sólo parecen pensar en la letra de su mega hits Girls, girls, girls.
Bueno, se les ve teniendo sexo, pero también aspirando e inyectándose todo lo que les pongan por delante.
Esa historial de excesos, además de sus canciones, fue el que los llevó a la cima, pero también fue su ruina. Los mismos que pusieron en jaque su continuidad y hasta dejó muertos en el camino.
¿Y la música? Bien, gracias. Y es que de música se habla poco en este biopic lleno de lugares comunes y algo predecible,
Eso sí, suenan todos los clásicos guitarreros que los fans querrán escuchar: desde Shout at the devil hasta Home sweet home, pasando por Dr. Feelgood y el inevitable Girls, girls girls.
Además, todos están en la banda sonora que salió también hoy, que incluye una canción con Machine Gun Kelly y que puedes escuchar en Spotify.
Ese disco marca también el regreso de Mötley Crüe, que estaban inactivos desde 2015, cuando dieron su último concierto.