Typewriter llegó desde India a Netflix con una fórmula que hace recordar a Stranger Things, pero también a series infanto/juveniles más antiguas, como Scoobie Doo: tres jóvenes amigos que se las dan de cazafantasmas en una antigua mansión, pero que se mueren de miedo cuando llega a vivir ahí una familia nueva y el pasado reaparece con su escalofriante carga.
Se trata de una casona abandonada y embrujada que sus nuevos habitantes llegan a abrir e iluminar, un lugar donde una antigua máquina de escribir ha quedado abandonada luego de que quien la ocupaba —el autor del libro El fantasma de Sultanpore— falleciera.
La chica del grupo de mini investigadores es hija del jefe de la policía local, quien también queda intrigado y trata de descifrar el enigma del lugar. Otro elemento que de alguna forma hermana a Typewriter con Stranger Things.
En los primeros episodios la producción nos regala un par de sobresaltos, pero luego la trama se hace algo repetitiva y falta de sorpresas, medio inocentona, lo que le juega en contra.
Un ensayo de Netflix India de cinco capítulos que puede ser del gusto de los fans del misterio y del terror (hay incluso algunas escenas gore), pero no de todo el mundo.