Las particulares observaciones del dibujante y escritor Nathan W. Pyle sobre el mundo que lo rodea son la principal inspiración de Un planeta extraño, la nueva serie de Apple TV+.
La cual nace de la misma mirada con que el artista ideó los gifs animados para Reddit, que más tarde se convertirían en su famoso webcomic Strange Planet.
El que tras plasmarse en libros para Harper Collins, ahora llega la streaming en el espacio animado concebido por el mismo Pyle y Dan Harmon, compuesto de diez entretenidas emisiones.
Las que, enfocadas en el público adulto, son protagonizadas por los habitantes de un planeta lejano, quienes son azules, no tienen género ni raza, pero viven situaciones conocidas.
Ya que sus experiencias no son muy diferentes a las de los terrestres y abarcan temas relacionados con el amor, la familia, la amistad, la adolescencia y la vida en general.
Aunque su forma de hablar es diferente, ya que ellos identifican lo que los rodea de manera más elaborada, hablando de máquina grupal móvil en vez de un bus o de rotación por el año.
Vivencias muy humanas
Un lenguaje que es esencial, junto al colorido ambiente en que los personajes se desenvuelven, en los diferentes relatos que componen cada capítulo de esta singular serie.
Los que tienen como escenario principal una ciudad costera, además de ambientes como la máquina voladora -avión- de su primera entrega, donde trabaja una joven asistente de vuelo.
La que experimenta un ascenso que cambia la relación con sus colegas, al mismo tiempo que también se conoce a un grupo musical que se ve sacudido por la partida de su cantante.
Dos narraciones paralelas que luego dan paso a otras historias marcadas por la ironía, varias de las cuales repiten protagonistas: la gerente de un restaurante y su interés amoroso.
Además de una pareja de hermanos que tratan de llevarse mejor o una criatura -hijo- que se va a estudiar lejos de casa, en tanto su progenitor -padre/madre- insiste en ir a dejarlo.
Los que usan términos como bombeador por corazón y cuencas ojales en vez de ojos, mientras encaran las alegrías, sorpresas y complicaciones de la vida. Al igual que los humanos.