En una entrevista reciente, la escritora valenciana Elísabet Benavent aseguró que Valeria, la serie que llega a engrosar el listado de producciones españolas de Netflix, la podrían disfrutar tanto quienes leyeron sus novelas como aquellos/as que no saben nada de ellas.
Esto, porque la serie mantiene la esencia de los libros en que se basa -saga que se inició en 2013 con Los zapatos de Valeria-, donde la historia gira en torno a las vivencias de Valeria y su heterogéneo grupo de amigas en Madrid.
Pero, además, sus ocho capítulos presentan nuevos desafíos y cambios para la protagonista, una escritora en medio de una crisis creativa y con un matrimonio que tambalea, como también para Lola (Silma López), Nerea (Teresa Riott) y Carmen (Paula Malia).
Es así como en el primero de sus capítulos, Valeria (Diana Gómez) debe decidir entre dedicarse por completo a escribir su primera novela o aceptar un trabajo de medio tiempo para conseguir algo del dinero que escasea en su cuenta corriente.
Más después de que su marido de hace seis años, Adrián (Ibrahim Al Shami), le recalca que les vendría muy bien una entrada extra. Pero ella cree que si se esfuerza, y encuentra finalmente una gran inspiración, su libro podría ser un éxito.
Al mismo tiempo, la sensual Lola continúa como amante de un hombre casado, Carmen no puede dejar de pensar en un compañero de trabajo llamado Borja (Juanlu González) y Nerea sigue viviendo en casa de sus padres, ocultándoles que es lesbiana.
Pero con el pasar de los días, y los capítulos, algunas nuevas complicaciones se sumarán a sus existencias. Como en el caso de Nerea, que siente que sus amigas no le dan la atención necesaria, o con Lola ayudando en la rehabilitación de su hermano menor.
Amistad y sensualidad de novela
De esta manera, y en un Madrid bajo un caluroso verano, las novelas de Benavent -también conocida en redes sociales como @BetaCoqueta– llegan a Netflix en la forma de una serie que, además, conserva el tono romántico-erótico de las páginas de su origen.
Esto porque, al igual que los libros, una parte importante de Valeria es la sexualidad de sus protagonistas y cómo, desde sus distintos mundos y con sus diversas personalidades, enfrentan las diferentes relaciones que se cruzan en sus caminos.
Con Valeria y su crisis matrimonial, donde se aparece la seductora figura de Víctor (Maxi Iglesias); el deseo de Lola por entablar una relación “más seria” o la búsqueda de Nerea por ser parte de un grupo donde no sea la única con una opción sexual “diferente”.
Todo complementado con varias cuotas de humor, la vivacidad de las calles madrileñas, interiores y vestuarios marcados por vibrantes colores, y una bailable banda sonora, que incluye desde el synthpop de K!ngdom hasta Bomba Estéreo y su famosa canción Fuego.
Características que en los momentos de menos conflicto, y por la importancia que se le da a la ambientación de sus tomas por varios instantes, le restan gravedad al espacio y le otorgan un estilo más cercano al videoclip, acorde a la juventud de sus protagonistas.
Y aunque la serie, como las novelas en que se basa, está enfocada en la audiencia femenina -hecha además por un equipo que incluye a directoras como Inma Torrente-, también puede cautivar a tod@s los que, con un criterio formado, buscan una bien contada historia.