Por Marcelo Morales C. 

Con sólo 28 años y cinco alabadas obras de su autoría, la influyente dramaturga inglesa Sarah Kane se quitó la vida en 1999. En una de sus piezas más destacadas, El amor de Fedra, revisita el mito griego centrado en esta princesa cretense que fue raptada por Teseo, con quien luego tuvo dos hijos.

Pero el problema central es que Fedra se enamora de su hijastro Hipólito, quien la rechaza, hasta que ella realiza un acto vengativo extremo que lo impresionará. Una historia intensa a la que Kane da una moderna vuelta de tuerca y que podrá ver, hasta el 28 de noviembre, en el Centro Cultural GAM, bajo la dirección de Francisco Krebs y con la reconocida actriz Paola Volpato en el rol de Fedra.

Entrante: Aproveche de dar una vuelta por el patio oriente del GAM. Con motivo del 15º aniversario del Museo Interactivo Mirador, ahí se instalaron seis módulos para que el público pueda disfrutar gratis. ¿Un recomendado? El Pixélate, una pared de clavos plásticos que se moldea con las formas de su cuerpo.

Plato de fondo: En el texto de Sarah Kane, elementos de la Grecia clásica se cruzan con otros modernos. Así, en esta puesta en escena verá irónicas referencias a la realeza inglesa, además de una cruda crítica a estos tiempos donde el consumo parece regularlo todo. De esta manera, el Hipólito que aquí apreciará es un desagradable joven, apático, amante de la comida chatarra y consumido por internet y la TV.

Postre: A la vuelta del GAM está Chipe Libre (Lastarria 282) y sus sabores bien peruanos. Pida los ravioles de ají de gallina, con huevos de codorniz y aceitunas de Azapa ($ 6.900), y un pisco como el sahumerio ($ 7.900), que se hace con Monte Fraile de 40°, más jugo de naranja, azúcar, clavo de olor y con un humo que sale del vaso y huele a canela.

* Funciones de miércoles a sábados.