Los sauvignon blanc de Casablanca
Por Carolina Freire
El Valle de Casablanca presentó, frente a una bella postal marina en la caleta de Quintay, la sexta versión de su tradicional “Sauvignon blanc by the sea”, que exhibe las últimas cosechas de sus bodegas asociadas. Si bien el 2016 fue un año complejo para esta variedad -por las intensas lluvias de abril en los sectores más costeros y que provocaron la pudrición de las uvas- algunas de las parras que salieron invictas muestran hoy buenísimos exponentes. Son vinos frescos, herbales, salinos, con acidez jugosa, ideales para capear el calor y llevar a la playa. Tome nota de estos favoritos, que en esta edición vienen en un rango de precios más alto por su escasa producción.
Uno es el nuevo Sauvignon Blanc CJ´s Barrel 2016 de viña Kingston ( $18.000 sólo en la viña). Cercano a Las Dichas, proviene de viejas parras y es uno de mis preferidos por la frescura que buscó su enólogo. Lo notable es que maceró con sus pieles y usó huevos de cemento en su fermentación para potenciar más la fruta, mineralidad y complejidad. El resultado es un vino elegante, con buena textura y aromas, que van desde la pimienta blanca hasta la piel de cítricos. Es perfecto para disfrutar con un sashimi de palometa.
Otro que me encantó es el Sauvignon Blanc EQ Coastal 2016, de viña Matetic ($ 9.900 en La Vinoteca), un vino fresco, con firme acidez, más toques salinos y cítricos. Tuvo una guarda en barricas usadas, pasó por acero y huevos de cemento, que le dieron redondez y equilibrio, con un final cremoso. Pruébelo en la exquisita terraza del restaurante La Mar ($ 25.800) con un ceviche clásico ($ 13.400).
Otro que destacó fue la novedad de viña Quintay, el Sauvignon Blanc Experience 2016 ($ 15.000 sólo venta directa), con un porcentaje de guarda en barricas usadas durante cinco meses. Este es un blanco untuoso, con notas minerales y a espárragos, y una buena acidez que hace salivar. Atrévase a disfrutarlo con piures o empanadas de mariscos.
En un lado más convencional está el Sauvignon Blanc Edición Limitada Blanco de Fudres 2015, de viña Morandé, criado en fudres (grandes contenedores de madera que ayudan a respetar la fruta y frescura) y otro pequeño porcentaje en huevos de concreto. Tiene aromas a durazno blanquillo, toques ahumados y gran volumen que destaca su potencia. Encuéntrelo camino al litoral en el restaurante y tienda House Casa del Vino ($ 9.900).
El último de mi lista es el 20 Barrels El Centinela Estate 2016, de viña Cono Sur ( $15.600 en La Vinoteca), el mejor blanco de la Guía Descorchados. Es delicado y a la vez expresivo, con aromas herbales y cítricos. Tiene buen volumen, con elegante final. Recomiendo acompañarlo con pescados grasos a la parrilla mientras cae la tarde.
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