Por: Darío Zambra Fecha:29 Jul 2021

El Bar La Virgen sorprende en Lastarria con una impresionante terraza en una azotea

Este conocido bar llegó a Lastarria con un local en un hermosa casona de cuatro pisos, donde lo mejor está arriba, en la azotea: una colorida terraza que ya es un hit en el barrio.

Este conocido bar llegó a Lastarria con un local en un hermosa casona de cuatro pisos, donde lo mejor está arriba, en la azotea: una colorida terraza que ya es un hit en el barrio.

Cada vez que el Bar La Virgen inaugura un nuevo local, lo hace en lugares increíbles, de esos que sacan una exclamación de sorpresa apenas entras.

Por ejemplo, el primero que tuvo fue una terraza en Bellavista con vista al cerro San Cristóbal -y que ya no existe-, mientras que en el barrio Yungay apostó por un edificio patromonial de cuatro pisos, con una terraza en la azotea desde donde hay una panorámica única del sector.

Su última apuesta, tras las sucursales de Providencia, Lo Barnechea, Vitacura y Pichilemu, es el barrio Lastarria, donde se acaba de instalar en una hermosa casona de calle Estados Unidos frente a Namur, a un costado del imponente Palacio Bruna.

Es una construcción de cuatro pisos, con tres salones repartidos por cada uno, dos de ellos con bonitos balcones, que en todo caso deja lo mejor para el cuarto.

Tienes que subir hasta la azotea para disfrutar del rincón más solicitado de este nuevo Bar La Virgen, una increíble y colorida terraza, donde puedes tomar un fresco coctel mientras disfrutas de la vista de esta zona con encanto.

Un espacio que, además, tiene el estilo de todos los otros locales, es decir, jardines verticales, letreros de neón con frases como Like a virgin, corazones alados en las paredes y, por supuesto, las mantas tejidas a mano para abrigarse en las tardes y noches más frías.

Imposible más instagrameable.

Toda la frescura del Bar La Virgen

Ojo que no se hacen reservas, así es que si quieres instalarte en la azotea debes llegar temprano o esperar si es que hay fila.

De todas maneras te puedes sentar en la terraza en la calle o en alguno de los salones repartidos por los tres primeros pisos, a disfrutar de la coctelería y la gastronomía del Bar La Virgen.

La carta es la misma que en las otras sucursales de Santiago, una bien fresca y que le da protagonismo a los productos del mar.

Lo mejor para partir la visita al lugar es alguno de los cócteles de la casa, todos coloridos, como el Virginal ($ 7.100), que tiene una base de mojito, vodka Stolichnaya de naranja y vainilla, pulpa de maracuyá y cerveza de la casa.

Si te gustan más dulces, entonces pide el PCB, hecho en base a gin Hendrick’s, con pulpa de piña, albahaca, pepino y jugo de limón. Muy fresco y digno de repetición.

Para disfrutar junto a los cócteles, en Bar La Virgen tiene varias opciones de tapas, desde los $ 3.900, sánguches, ensaladas y ceviches, que son el hit entre sus público.

Aunque para comenzar lo mejor es compartir la tabla La Virgen ($ 14.900, en la foto), que trae dos empanaditas de champiñones, dos de camarones, dos mini ceviches de reineta, camarones apanados, brochetas de pollo y lomo y croquetas de queso de cabra con mermelada de ají cacho de cabra, más salsa tártara para untar.

También encuentras platos de fondo, como el muy recomendado atún grillado ($ 14.500), un filete que llega en su punto, rosadito en el centro, y sobre un risotto de camarones.