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La “imitada, pero jamas igualada” piscola del Rapa Nui, un clásico al que siempre hay que volver

Por Damaris Torres30 Dic 2020

Bares

La “imitada, pero jamas igualada” piscola del Rapa Nui, un clásico al que siempre hay que volver — Foto: Valentina Miranda Vega.

Incomparable es esta fuente de soda que se caracteriza por sus almuerzos caseros, sus chorillanas y, cómo no, por sus piscolas llenas hasta el borde de este destilado. Haz la prueba, porque podrás mirar la hora a través del vaso.

Difícil la tuvo don Carlos Alarcón, el administrador del bar Rapa Nui, ese clásico que está justo en la esquina de José Miguel Infante con Los Jesuitas, en Providencia. Y cómo no, si por la pandemia tuvo que cerrar durante siete meses (sin delivery), algo nunca antes visto desde que abrió en 1976.

Eso, hasta el 3 de septiembre, cuando volvió a levantar las cortinas de este clásico recinto conocido por sus piscolas “imitadas, pero jamás igualadas”, como sostiene Alarcón a Finde, sobre del coctel que todos piden en su local y que cuesta sólo $ 4.000.

Se trata de un vaso lleno hasta el borde de pisco y hielo (tal como se ve en la foto), el que tendrás que tomar sorbito a sorbito para poder hacerle espacio a la bebida cola que te entregarán en una lata.

Ni siquiera intentes pedir otro vaso para dividir la porción, porque recibirás un rotundo no, como respuesta. Esto, porque acá se siguen las tradiciones, y en este caso se señala que se parte en las rocas y se termina con Coca Cola. Simple.

Tal como lo solicita la autoridad sanitaria, se instalaron ocho mesas en la vereda que rodea esta fuente de soda, para que vayas por el trago antes descrito; como también por una cerveza Heineken de un litro ($ 4.000), o por una de medio de Kunstmann Torobayo ($ 3.000).

Churrascos, chorrillanas y almuerzos en bar Rapa Nui

El Rapa, como el llaman los parroquianos, abre a las 12 PM, para ofrecer unos contundentes almuerzos de recetas caseras, como lentejas, pescado frito con puré o papas mayo, pollo a la mostaza con arroz, entre otras opciones que cambian a diario y que cuestan $ 4.000 (incluye la ensalada y el agregado).

Ojo que los vegetarianos también tienen sabrosas opciones, porque en este local en el que se paga con efectivo o transferencia (no hay opción de tarjetas), todos puedes disfrutar de sus preparaciones y bebestibles.

Ahora, si vas en la tarde, buena idea es que pidas sus chorrillanas. Las tienen en dos versiones una chica ($ 6.000) y otra grande ($ 9.000). De hecho, para prevenir los contagios, llegará a tu mesa dividida en porciones que dependerán de la cantidad de comensales, así todos degustarán sin riesgo sus papitas fritas, carne picada y cebolla frita con huevo revuelto.

También te irás a la segura con alguno de sus sánguches, como el de “mechada chacarera” ($ 4.000) que preparan en una crujiente marraqueta doble mojadita con el jugo de la carne, y frescos porotos verdes. Una irresistible delicia, al igual que su “churrasco” ($ 4.000).