Como ya lo hizo en cintas como Nikita –a estas alturas un clásico de su filmografía- o la más reciente Lucy, con Scarlett Johansson, en Anna: El Peligro Tiene Nombre el director francés Luc Besson vuelve a fijar su mirada fílmica en una mujer a la que se le impone la violencia como parte de su destino.

En esta oportunidad, la figura central es Anna Poliatova (la modelo Sasha Luss, en su primer protagónico), una hermosa joven rusa que se ve obligada a convertirse en una mortal agente de la KGB, después de enfrentar la orfandad y los malos tratos de su pareja.

Su historia se conoce a través de un relato que va y viene a lo largo de distintas décadas –con lo que algún espectador no muy atento puede confundirse-, donde el eje central es el momento en que Anna, haciéndose pasar por una chica común, es descubierta en una feria de Moscú por el representante de una importante agencia de modelos.

Gracias a su innegable belleza, la muchacha pasa a formar parte del staff de maniquíes eslavas de la agencia en París. Pero pronto Anna deberá cumplir la misión por la que la KGB orquestó su llegada a suelo francés: eliminar a un importante hombre de negocios ruso que también trafica armas. A este “encargo” seguirá una larga lista de nombres por liquidar.

Sin embargo, tras sus pasos también está la CIA y uno de sus principales agentes, Leonard Miller (Cillian Murphy), quienes en esta oportunidad parecen ir un paso más adelante que sus colegas en el Kremlin y logran que Anna se pase a su bando, luego de prometerle un pronto retiro.

Más de lo mismo

Así se teje, y enreda, una trama que usa de nuevo ingredientes probados por Besson, con una bella mujer que debe convertirse en una “máquina de matar”, desplegando varias escenas de coreografiados intercambios de balas, golpes y patadas. Por lo mismo, a los pocos minutos de metraje, Anna pierde por completo la novedad.

Y a pesar de la presencia de figuras como Helen Mirren, como la gélida jefa de la chica en la KGB, o Luke Evans, como su colega y objeto amoroso, la cinta no logra despegar ni entretener. Esto la convierte en otro punto bajo en la carrera del cineasta galo, luego de su desafortunada visión de los cómics de Pierre Christin y Jean-Claude Mézières, en Valerian y la Ciudad de los Mil Planetas.

DIRECCIÓN: Luc Besson

PROTAGONISTAS: Sasha Luss, Helen Mirren, Luke Evans, Cillian Murphy, Lera Abova

GÉNERO: Acción

CALIFICACIÓN: Para mayores de 14 años