Tras el viaje de Doctor Strange en el multiverso de la locura por los universos paralelos de Marvel, es el turno de Ant-Man and the Wasp: Quantumania para revelar los secretos del Reino Cuántico.

Ya que la tercera cinta de la saga centrada en el personaje encarnado por Paul Rudd, nuevamente dirigida por Peyton Reed, ofrece una mirada más acabada de esa minúscula dimensión.

La cual también es conocida como Microverso y recibió la visita del Scott Lang, el héroe encarnado por Rudd, brevemente en la primera de sus cintas y luego cinco horas en medio del blip de Thanos.

Aunque una figura relacionada directamente con él estuvo allí 30 años: Janet van Dyne (Michelle Pfeiffer), la esposa de Hank Pym (Michael Douglas) y madre de Hope (Evangeline Lilly).

La que se convierte en una pieza esencial de esta película por su vínculo con el Reino Cuántico, ya que la mayor parte de la trama se ambienta en sus imponentes paisajes subatómicos.

El inesperado viaje al Reino Cuántico

Sin embargo, su inicio se reserva para mostrar a Lang y sus seres queridos en sus vidas cotidianas en San Francisco, donde él hace poco publicó un libro con sus experiencias como superhéroe.

Al mismo tiempo que Hope, alias la heroína Wasp, se hizo cargo de la fundación de su padre y usa las partículas Pym -que alteran la masa y el tamaño- en diferentes causas sociales.

Y la ahora hija adolescente del protagonista, la aguerrida Cassie (Kathryn Newton), ha estado trabajando con su abuelo postizo Hank en una máquina que comunica con el Reino Cuántico.

Una invención alabada por todos menos por Janet, quien esconde un peligroso secreto en torno su experiencia en esa dimensión. La que volverá con fuerza a su vida y la de sus seres queridos.

Ya que una falla en la máquina de Cassie hace que todos sean transportados hacia ese mundo subatómico, donde quedarán divididos en dos grupos y expuestos a diferentes desafíos.

Una de las versiones del poderoso villano

Así, Hope y sus padres deben esconderse de quien hizo de Janet una marginada en ese lugar, mientras esta última busca a un viejo aliado -encarnado por Bill Murray- que tal vez los ayude.

Al mismo tiempo que Scott y Cassie son atrapados por rebeldes que buscan derrocar a quien destruyó sus pueblos: Kang el Conquistador (Jonathan Majors), el mismo enemigo de Janet.

Una figura que llega a instalarse como gran antagonista -a futuro y en sus múltiples versiones- del Universo Cinematográfico de Marvel, cuya Fase 5 parte precisamente con esta película.

La que deja atrás su faceta de entretención más simple y familiar, que hizo tan entrañables las anteriores entregas, introduciéndose por completo en los grandes efectos y fantásticos universos.

En este caso mejor dicho mini-universos plagados de inusuales personajes y un potente villano, gracias al trabajo de Majors, donde además obtienen un mayor protagonismo Janet y Cassie.

Lo que deja un tanto relegado el encanto de Scott, mientras el UCM inicia una renovada etapa de series y cintas que siempre serán bien recibidas por los fans de su incontenible mundo de superhéroes.

DIRECCIÓN: Peyton Reed

PROTAGONISTAS: Paul Rudd, Evangeline Lilly, Jonathan Majors, Michelle Pfeiffer, Michael Douglas, Kathryn Newton, David Dastmalchian, William Jackson Harper, Katy O’Brian, Bill Murray

GÉNERO: Aventura, Ciencia Ficción, Acción

CALIFICACIÓN: Para todo espectador mayor de 7 años