Ambición, monumentalidad, exceso… son algunas de las palabras que quedan rondando en la mente tras experimentar las tres horas y algo más que dura la nueva creación de Damien Chazelle: Babylon.

Un largometraje con el que el realizador de aplaudidas cintas como Whiplash, La La Land y El primer hombre en la Luna se embarca en una narración marcada por la audacia y la grandilocuencia.

Algo que se atrevió a concretar tras convertirse en un favorito de la crítica y el público con sus anteriores y contenidos trabajos, dando vida hoy a una obra tan espectacular como abrumadora.

La que también se presenta como un claro homenaje al Hollywood clásico, lejos de títulos como Mank, de David Fincher, y ¡Ave, César!, de los Coen, y en las antípodas de Cantando bajo la lluvia.

El clásico de Gene Kelly y Stanley Donen que comparte con Babylon la época de su ambientación, cuando de las películas mudas se pasó al cine sonoro, y sirve de referencia a parte de su trama.

Varios protagonista, una sola trama

La que se inicia en Los Angeles de 1926, cuando un joven mexicano transporta un elefante hacia una mansión en medio de la nada, que será la atracción de otra de las fiestas de Don Wallach (Jeff Garlin).

Un importante ejecutivo de la naciente industria fílmica, cabeza de los estudios Kinoscope, famoso por las bacanales veladas a las que concurren las figuras de la industria del entretenimiento.

Donde el chico del elefante, que se llama Manny (Diego Calva) y es empleado por quienes ayudan en la cita, conoce a Nellie LaRoy (Margot Robbie), una desinhibida aspirante a actriz de New Jersey.

Dos figuras claves en la cinta junto a otros participantes de la fiesta: el trompetista Sidney Palmer (Jovan Adepo), la cantante Lady Fay Zhu (Li Jun Li) y la columnista Elinor St. John (Jean Smart).

Además de Jack Conrad (Brad Pitt), estrella de las películas mudas y símbolo de Tinseltown o la “ciudad de oropel” -el latón que imita oro-, como se conocía a Hollywood por su imagen resplandeciente.

Entre el brillo y la oscuridad de Hollywood

Una época también de surgimiento para Nellie, que atrajo al público con su mezcla de talento y descaro, mientras a Manny su cercanía con Jack le comenzó a abrir puertas en la industria fílmica.

Pero como detrás del brillo se oculta la oscuridad, pronto la fama de algunos de los protagonistas se empieza a nublar con la aparición de las cintas habladas y otra generación de espectadores.

Lo que lleva a Babylon a los instantes más dramáticos de su narración, en medio de la mezcla de tragedia, absurdo y comedia que envuelve su historia, sin olvidar su homenaje a la meca del cine.

Donde se combinan los bailes desenfrenados, kilos de cocaína, rodajes sin luz artificial y el ataque de una serpiente cascabel, con declaraciones de amor, racismo y algunas muertes accidentales.

Además de un amplio y consistente elenco, donde se destaca el trabajo de Pitt, Calva y Robbie, en medio de la verdadera montaña rusa de imágenes y emociones por la que lleva la cinta.

FICHA TÉCNICA

DIRECCIÓN: Damien Chazelle

PROTAGONISTAS: Brad Pitt, Margot Robbie, Diego Calva, Jean Smart, Jovan Adepo, Li Jun Li, Olivia Hamilton, P. J. Byrne, Lukas Haas, Max Minghella

GÉNERO: Drama, Comedia

CALIFICACIÓN: Para mayores de 14 años