Pastelería Doña Petita es uno de esos lugares que enamoran apenas entras. Cada uno de los rincones de esta local de Av. 10 de julio tiene encanto.
Desde el televisor de la década del 60, que funciona, y los manteles tejidos a crochet, hasta los murales de las calles de Valparaíso que recuerdan los paseos de Doña Petronila, o Petita.
Es como un viaje en el tiempo hasta 1949, cuando comenzó a funcionar esta pastelería, de esas clásicas de barrio, con berlines, calzones rotos y empanadas.
Estuvo a punto de cerrar hasta que un vecino del barrio la recuperó y decoró como si fuera la casa de Petronila, autora de la mayoría de las recetas según cuenta la leyenda.
Ahí lo que manda es la pastelería clásica, la que puedes probar en algunas mesas instaladas en las afueras del lugar, o pedir para llevar.
Dulce caseros y naturales
Entre los imperdible de Doña Peta están las empanadas ($ 1.500), las clásicas de horno, con un buen pino que incluye pasa, o las de queso ($ 1.500) de masa de hoja, cargadas de queso.
Además, aquí elaboran algunas opciones dulces que cuesta encontrar en otros lados, como los borrachitos ($ 2.000), quequitos mojados en licor y cubiertos de crema chantilly y marrasquino.
O los berlines ($ 800) fresquitos, que puedes pedir con la clásica crema pastelera hecha en el lugar, manjar o membrillo.
Otra opción son los calzones rotos ($ 250 cada uno), bien cargados de azúcar flor o los quequitos ($ 500), con chispas de chocolate.
También puedes encargar además los clásicos tapaditos y canapés, de pollo pimentón, huevo o jamón, por ejemplo.
Pastelería Doña Peta
Dirección
Av 10 de julio 101 A
Santiago,
Santiago
Chile
Teléfono
Website
https://es-la.facebook.com/dona.petitapateleria.5
Horario
Lunes a sábado 9.30 AM a 8.30 PM