Don José Santos tiene 90 años, nació el 28 de febrero de 1928, y es el garzón más antiguo de Santiago, al menos en ejercicio.
Este 28 de agosto cumple 60 años atendiendo en el mismo lugar, la Confiteria Torres, ese icónico local que ocupa el Palacio Íñiguez, (Alameda 1570) y que ya de entrada es puro patrimonio: abrió en 1879, y es junto con La Piojera, uno de los restaurantes más antiguos de Santiago.
Toda una vida en la que en el caso de Don José, sus propios recuerdos se mezclan con la historia de Chile, como el origen del “barros luco” por ejemplo, esa maravilla de sánguche con carne a la plancha y queso caliente, que solía pedir don Ramón Barros Luco, Presidente de Chile entre 1910 y 1915.
Historia y origen que Don José repite a todo comensal que lo pida, además de otras anécdotas.
“Don Jorge Alessandri cuando era Presidente, venía después de la Parada Militar y decía: ¡vengo con los fierros calientes! y se tomaba un vaso de chicha”, cuenta Don José con una sonrisa.
También le ha tocado atender en persona a más de un Presidente, por la Confitería Torres han pasado Salvador Allende, Eduardo Frei, Ricardo Lagos, Patricio Aylwin, e incluso el actual, Sebastián Piñera.
“Gente muy cariñosa, en especial don Patricio Aylwin y la señora Marta Larraechea de Frei; muy amorosa”, recuerda.
Fotos: Valentina Miranda Vega.
Toda una vida en la Confitería Torres
Llegó a la Confitería Torres el 28 de agosto de 1958, después de trabajar en las minas del carbón y pasar varios sustos.
“Me tocaba trabajar bajo tierra y vi muchos muertos a causa del gas grisú, así es que decidí retirarme. Podía devolverme a Villarrica, mi tierra, o venir a conocer Santiago”, cuenta don José Santos.
Finalmente, se decidió por venir a Santiago.
“El primer día estaba caminando por la Alameda y me encontré con la Confitería Torres. Me quedé mirándola y el dueño de entonces, Bartolomé Alomar, me dijo “¿No quieres trabajar, hombre?”.
Y don José aceptó. Al principio como copero, lavando vasos y copas, y luego como garzón, oficio que ejerce hasta hoy.
Desde entonces, todos los días se despierta a las 5 AM en su casa de San Bernardo, para tomar el bus que en un trayecto de una hora lo deja en calle Tarapacá.
Desde ahí camina al restaurante, para atender, entre las 9 AM y las 4 PM, sus cuatro mesas, ubicadas cerca de la barra con total diligencia y cariño.
Sólo una vez ha dejado de trabajar, durante el año en que la Confitería Torres pasó a manos de su actual dueño, Claudio Soto, y cerró para ser restaurada, cerca de 10 años atrás.
“El local venía de capa caída y me daba mucha nostalgia. Don Claudio me dijo que la arreglaría y que me llamaría. Así fue. Y eso que yo ya era joven, tenía 80 años”, cuenta entre risas.
Volvió a la carga para atender a sus clientes de siempre, algunos de ellos estudiaban en el colegio San Ignacio de Alonso Ovalle hace décadas y que hoy lo visitan junto a sus hijos.
Lo que piden los habitué son los platos de siempre, como el emblemático “barros lucos”, y otro más nuevos, como el “arroz chilote“, que don José describe como “uno bien caldoso, criaturero y levanta muertos“.
Y, ¿hasta cuándo trabaja don José? “¡Hasta el 2050!”, responde entre risas.
HORARIO: Lunes a sábado, 9 AM a 12 AM.
ESTACIONAMIENTO: En calles aledañas, con propina.
Confitería Torres
Dirección
Alameda 1570
Santiago,
Santiago
Chile
Teléfono
Website
https://www.confiteriatorres.cl/
Horario
Lunes a viernes, 10 AM a 8 PM
Estacionamiento
En subt. centro cultural La Moneda
Edad
Todo público.
Con Reserva
Sí