Así como lo demostró con El Mecanismo, 3% y Hermandad, Brasil mantiene su buena performance en Netflix con Bajo la Mirada de Nadie, una liviana e inteligente serie de comedia que trae a la pantalla a un grupo de ángeles guardianes, todos colorines, que desafían las rígidas normas con que deben ayudar a los humanos sin que estos lo noten.
Encabezados por Uli (el carismático y joven actor Victor Lamoglia), lo que ellos buscan es desprenderse de tanta burocracia que implica el sistema con el que operan y ser más proactivos para enfocar su cooperación hacia hombres y mujeres que sienten que de verdad necesitan esa ayuda “celestial”.
Caos
Uli comienza a tomar sus propias decisiones y así conoce a Miriam (Kéfera Buchmann), una chica feminista, vegana e idealista (personaje muy actual y adorable) que también busca cambiar, en su caso, la humanidad. Decisiones en que este ángel guardián involucrará a otros “colegas” y que llevarán al caos planetario.
Por supuesto que la trama es fantástica, pero está bien resuelta y resulta hasta verosímil, situación a la que contribuye también el oficio del director (Daniel Rezende, nominado a un Oscar por su brillante trabajo de edición en Ciudad de Dios) y de los actores, todos muy destacables en lo suyo.
Ocho episodios cortos (de unos 30 minutos) y siempre entretenidos, perfectos para una maratón que relaje y saque varias sonrisas.