Gracias a Netflix y exitosas películas como A todos los chicos de los que me enamoré, Noah Centineo se convirtió en símbolo de la comedia romántica. Algo que quiere comenzar a cambiar con El novato.

La nueva serie protagonizada por el veinteañero actor estadounidense que, si bien está hecha para la misma plataforma y tiene cuotas de humor, lo pone en un papel bastante diferente.

El rol para el espacio creado por Alexi Hawley -que tiene entre sus productores a Doug Liman (Al filo del mañana)- que lo aleja por completo de los chicos atléticos y populares que interpretó en sus cintas.

Ya que ahora Centineo se pone bajo la piel y los trajes formales de Owen Hendricks, un joven abogado que llega a trabajar a la CIA en el departamento encabezado por su Consejero General.

El cual en la ficción se llama Walter Nyland (Vondie Curtis-Hall) y junto a su equipo debe proporcionar asesoramiento jurídico a la Agencia Central de Inteligencia de los Estados Unidos.

Una labor más bien de escritorio que el caso de Owen lo pone en medio de una incesante y particular trama, que lo hará viajar a diferentes países y enfrentar el peligro de ser asesinado, entre otros.

Un caso donde Owen debe encarar el peligro

Lo que se desarrolla a lo largo de ocho emisiones que tienen su punto de partida cuando al novato integrante de la CIA le asignan revisar las cartas de quienes intentan extorsionar a la agencia.

Muchas de las cuales no revisten mayor peligro hasta que Owen descubre la de una mujer que se presenta como Max Meladze (Laura Haddock) y asegura ser una ex-agente con mucha información.

La que no dudará en revelar si no logra que la liberen de una cárcel en Phoenix y la hagan volver a su natal Rusia, como le afirma directamente al abogado cuando él la va a conocer en persona.

Visita que le reafirma al protagonista que está frente a una verdadera amenaza, por lo que, con el consentimiento de Nyland, decide seguir con el caso, llegando a un acuerdo secreto con Meladze.

Una decisión que lo hará enfrentar a doble agentes, compañeros poco solidarios, varias golpizas y persecuciones, y también algo de romance, como se espera en toda trama de espionaje.

Lo que El novato desarrolla con una narración ágil y envolvente, que logra entretener y mostrar la faceta más arriesgada de Centineo, además de poseer un impactante final que deja la puerta abierta a otro ciclo.

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