En los últimos años, el podcast se convirtió en un fenómeno informativo y de entretención que también ha inspirado series. Como en Netflix, donde ha sido fuente de shows como Dirty John, Midnight gospel y Equinox, el segundo título danés original de la plataforma.
El que llega después del exitoso espacio The rain y precedido por la fama alcanzada en su país de origen por Equinox 1985, el archivo de audio digital de ficción, creado hace cuatro años y que encabezó la lista de podcasts de iTunes en Dinamarca por varias semanas.
Ocho emisiones que se movían entre la delgada línea que divide la fantasía de la realidad, y que hoy llegan al streaming transformados en seis capítulos que tienen como su eje a Astrid Agerskov (Danica Curcic), periodista que conduce el programa radial La voz de la noche.
Y es precisamente un llamado que recibe durante una de las emisiones en vivo el que revive un trauma de su pasado y desencadena el relato. Un conmovedor hecho que ocurrió en 1999, cuando ella tenía 9 años y su hermana mayor Ida (Karoline Hamm) desapareció.
Pero la adolescente no fue la única que se desvaneció sin dejar rastro, también el grupo de 21 compañeros junto a los que viajaba para celebrar su graduación de secundaria, visitando a los familiares de cada uno de ellos como es costumbre en Dinamarca.
Un viaje del que solo regresaron Amelia (Fanny Bornedal), Falke (Ask Truelsen) y Jakob (August Carter), el mismo que llamó a la radio a Astrid. Lo que eran los mejores amigos de Ida y fueron señalados como los posibles culpables de las desapariciones.
Una inquietante investigación
Esto viene a remover la existencia de Astrid, quien tras la ausencia de Ida comenzó a experimentar terribles pesadillas, como se vio al inicio del relato. Y aunque logró controlarlas, el pasado la sigue afectando y la llevó a alejarse de su marido.
Todo empeora cuando, movida por la llamada, decide regresar a Copenhague y empieza a buscar nuevas pistas sobre lo que realmente pasó hace dos décadas. Así, contacta al hermano de Jakob, poco antes de que este último se quite la vida.
Un traumático suceso que hace que Astrid vaya explorando aún más y contacte al investigador que estuvo a cargo del caso. Así conoce las declaraciones que los sobrevivientes dieron en ese tiempo y la existencia de un misterioso profesor.
De manera paralela, el público es testigo de pasajes sobre lo que vivieron Ida y sus amigos antes de desaparecer, donde son claves un libro llamado Grimorio, una isla, un ritual en el equinoccio y un ser místico conocido como El Hombre Liebre.
Una sucesión de eventos, objetos y personajes que se van uniendo a la historia como piezas de un rompecabezas, mientras sus seis capítulos van conjugando de manera precisa lo que experimenta Astrid en la actualidad con lo que ella vivió siendo niña.
Un juego entre pasado y presente, y entre lo que se conoce como realidad y posibles mundos paralelos, que con un ritmo pausado, pero constante, va cautivando al espectador, haciendo de Equinox un nuevo y buen ejemplo de las series hechas en Europa.