Por: Darío Zambra Fecha:8 Jun 2023

Barrio Sur: el restaurante patrimonial que homenajea a la historia y sabores del barrio Franklin

En un preciosa casona con terraza de Av. Viel encuentras este restaurante, donde puedes probar sabrosa cocina chilena y a la vez conocer parte de la historia de los barrios del sur de la comuna de Santiago.

Los amantes del barrio Franklin, el ex Matadero y las calles del Persa Biobío tienen que ir a conocer sí o sí Barrio Sur.

El restaurante que en plena pandemia abrieron los hermanos Francisco Toro y Máximo Picallo en una preciosa casona de Av. Viel, a pasos de Av. Rondizzoni y del Parque O’Higgins.

La misma casa de 1938, con un gran antejardín -hoy convertido en terraza-, que en los años 80 compró la madre de estos hermanos y donde Francisco creció y que como niño y adolescente lo llevó a recorrer las calles del sector sur de la comuna de Santiago.

Zonas como Viel, San Ignacio, Franklin, el ex Matadero y el Persa Biobío y que ahora homenajea con Barrio Sur, que debe su nombre precisamente a todos esos lugares y su historia.

La que también se evoca a en cada uno de los rincones del restaurante, con salones dedicados a cada uno de estos barrios y sectores y con interiorismo a cargo de Gino Falcones, el mismo detrás de Sarita Colonia y Fe.

Así, por ejemplo, en una de las paredes puedes ver un gran mural de legendario recorrido de micro Matadero-Palma y en otra fotografías de locales y picadas emblemáticas de Franklin, algunas ya desaparecidas, como el Melville o Los Tres Mosqueteros.

Cocina chilena, patrimonial y urbana

Historia y tradición que también se saborea en la propuesta gastronómica de Barrio Sur, que tiene su base en la cocina chilena y que ellos definen como “patrimonial y urbana”.

De hecho, parte esencial de su carta son los productos clásicos del ex Matadero y que encuentras en varias de sus platos de fondo y opciones para compartir.

Como la Tabla Franklin ($ 18.900, alcanza para tres personas), que lleva malaya, longaniza, prieta y unas mollejas que te querrás repetir de tan sabrosas.

También en una de las novedades de su carta, las criadillas al pil pil ($ 8.900), que vienen con todo su caldito y sopaipillas para sopear.

Mientras que entre los fondos hay clásicos chilenos como arrollado con prieta y papas cocidas ($ 12.900), asado de tira ($ 8.400) y arrollado de huaso ($ 10.900), que puedes acompañar con papas nativas ($ 3.900).

Además, la coctelería de autor también tributa a los barrios, como el Hue-Mule, por la población Huemul, con ron blanco, jugo de pomelo, limón, ginger beer y un toque de angosture; o el Peter Lake, por la calle Pedro Lagos, de gin, blue curacao, jugo de piña y limón.

Y no te vayas de Barrio Sur sin probar sus postres, maravillas como una sopaipillas pasadas con todo el saborcito casero ($ 3.400) y el remolino de borgoña ($ 3.900), un sorprendente turrón de vino con una base de jalea con frutas.